Aquellas personas que han experimentado la paternidad o la maternidad saben la manera tan drástica en la que un hijo o una hija le puede cambiar la vida a alguien. El modo en el que las prioridades, el tiempo e incluso las aficiones se ven afectadas por un nuevo ritmo de vida. El cambio, a veces, es tal, que incluso se desarrollan nuevas amistades en base a las relaciones que los más pequeños tienen en la escuela.
Esto es exactamente lo que le ocurrió a David Moreno 'Lobito', cantante de Muxutrock, un grupo de música surgido en el barrio de Buztintxuri, en Pamplona, que se formó en 2014 entre padres del colegio. A día de hoy la banda es para él una segunda familia y por ello nos recibe con sus 'hermanos' del rock: Ritxar San Martín, el bajista; Jose 'Santotxu' Arteta y Sergio Mariñelarena, los guitarristas; y Aitor Burguete, el saxofonista. Javier Elcano, el batería; y Ion Ander Bote, a la trompeta, no han podido acudir pero están en boca de todos, como si realmente estuvieran en esta amena charla que mantenemos a caballo entre la casa de 'Santotxu' y su local de ensayo.
David Moreno
Cantante
Rojillo hasta la médula y forofo de San Fermín, estudió Cocina en Burlada y actualmente, con 45 años, trabaja en una empresa dedicada a la logística para construcción, protección y seguridad, pero su relación con la música le llevó a entrar en Musikolore, un grupo de canciones infantiles que había en el colegio de Buztintxuri, donde estudiaban sus mellizos Mayi e Iñari. Esta afición por la música hizo que junto a otros padres crease en 2014 Muxutrok, su banda, que se ha convertido en su segunda familia.
'Santotxu' Arteta
Guitarra
El más veterano de Muxutrock, Jose 'Santotxu', tiene 55 años y es el más animado de todos, ya que después de las actuaciones siempre tiene ganas de celebrarlo, algo que probablemente tiene que ver con que sus hijas, Saioa y Leire, son ya más mayores y tiene más tiempo para disfrutar junto a su mujer, Elixabete, natural de Beasain. 'Santotxu' trabaja en una empresa de frigoríficos industriales. pero ya tenía experiencia sobre los escenarios, por lo que fue la primera persona con la que contactó David.
Sergio Mariñelarena
Guitarra
Sergio Mariñelarena, de 47 años, también es natural de Pamplona y, como la mayoría de sus compañeros de grupo, reside en el barrio de Buztintxuri, en cuyo colegio estudian sus dos hijos, Erik y June. Farmacéutico de profesión, es el segundo guitarrista con el que cuenta Muxutrock, formando equipo como guitarrista rítmico con 'Santotxu', quien es el guitarra solista. Le gusta viajar, la lectura y el deporte, aunque reconoce que con niños aún pequeños es muy difícil tener tiempo libre.
Aitor Burguete
Saxofón
Aitor Burguete, de 44 años, es el saxofonista del grupo, uno más de esta familia, aunque entró a formar parte de ella un año más tarde que el resto. Aunque nació en Barañain, y en Buztintxuri siempre había hecho "una vida de dormitorio", fue el nacimiento de sus hijos: Asier, Aimar y Ander -todos con la “A”, igual que él y su mujer Ainhoa -lo que le llevó a crear una vida paralela cada vez más completa en este barrio de Pamplona. Aitor, que trabaja en una notaría, es aficionado a las novelas de fantasía.
Ion Ander Bote
Trompeta
Ion Ander, junto con Aitor, completa la familia de viento de Muxutrock. Este trompetista, al igual que Aitor, también entró al grupo cuando éste ya llevaba un año dando vueltas por ahí. A sus 43 años, irundarra orgulloso pero asentado en Buztintxuri, es el "giputxi" de la banda, aita de Ane y Telmo y está casado con Cristina, de Obanos. No podemos olvidarnos de de Ritxar San Martín, el bajista, y de Javier Elcano, el batería, que trabaja como profesor de FP en un instituto de Altsasu.
¿Cómo surgió Muxutrock?
-David: La banda nació tontamente. De los siete integrantes que somos ahora, cinco hemos sido padres del colegio de Buztintxuri. Por aquel entonces formábamos parte de Musikolore, un grupo de canciones infantiles que había en el centro, con el que en 2014 nos ofrecimos a la comisión de fiestas del barrio para hacer un concierto. Y después de ese concierto le dije a la comisión de fiestas que tenía un grupo de versiones de rock’n’roll y que queríamos tocar, y a ellos les dije que la comisión nos lo había pedido, cosa que no era así (risas). (Te presentamos a los integrantes de Muxutrock)
¿Entonces el grupo se formó por las ganas que tenías de cantar?
-David: Sí (sonríe). Salimos a tocar Ritxar y yo con otros cuatro amigos, que tocaron sólo ese día, pero nosotros dos nos quedamos con más ganas, así que entre los dos formamos lo que ahora es Muxutrock.
¿Y cómo entre Ritxar y tú encontrasteis al resto de miembros?
-David: Lo primero que hice fue llamar a Santotxu, amigo mío de las piscinas de San Juan, porque sabía que tocaba la guitarra; y él llamó a Javi.
-'Santotxu': Yo tenía unas ganas brutales de tocar. Nos juntamos en Nueva Artica y vimos que nos faltaba un batería para tener el grupo completo porque en ese momento teníamos cantante, bajista y guitarra. Yo conocía a Javi porque era mi vecino y sabía que ya había tocado en una banda de rock anteriormente.
-David: Todos habían estado tocando en otras bandas antes, menos yo… Por eso hago yo el grupo, por desconocimiento en la materia (ríe).
-Ritxar: Yo llamé a Sergio.
-Aitor: Ion Ander y yo nos presentamos por nuestra cuenta (Risas). Aparecimos un día y dijimos: "oye, queremos hablar con vosotros"...
-David: …Y hasta hoy (sonríe).
El colegio de vuestros hijos se convirtió en un lugar importante para vosotros entonces…
-Aitor: Sí. Es increíble la potencia que tiene un colegio de hacer barrio. La sensación que yo tenía en Buztintxuri era la de estar en un pueblo dormitorio, ya que al ser de Barañain venía aquí solo a dormir. Pero cuando tuve un hijo nos conocimos Ion Ander y yo en la escuela de los críos y desde entonces mi cambio de vida fue brutal, porque empecé a relacionarme con otros padres y empecé a vivir otras cosas.
¿A qué creéis que se debe el éxito de Muxutrock?
-David: Tenemos la suerte de que los mejores escriben para nosotros. Al final estamos tocando canciones de grandes artistas como El Drogas o Fito, que para mí es Dios hecho música. Es devoción lo que siento por él y es una suerte poder escucharle y cantar sus temas. Creo que para mí la música no sería igual sin Fito y sin todo lo que me han inspirado sus temas.
¿Cuál es vuestro repertorio?
-David: Pues como comentaba hacemos versiones de Barricada, Reincidentes, Los Suaves, Fito, Platero y tú…
-'Santotxu': Sobre todo, hacemos rock nacional en español y euskera, de los 80 y los 90. También algo más actual, como Los Zigarros, Gatibu o Vendetta.
-David: La verdad es que tenemos como 65 o 70 canciones, pero ya hay unas cuantas que tienen que estar sí o sí, como 'Dolores se llamaba Lola', de Los Suaves; 'Gabak Zerueri Begire', de Gatibu; o 'Txus', de La Polla Records.(Repasamos los grandes éxitos de Gatibu)
¿Y cómo sois recibidos en el barrio?
-David: Pues genial porque habremos tocado ya más de cincuenta veces y habrá gente que nos habrá venido a ver cuarenta al menos...
-Ion Ander: ¡Qué moral! (Risas)
-David: Esto empezó en 2014 como algo para un único día y estamos en 2022 y acabamos de tocar de nuevo en las fiestas del barrio. Creo que es lo que dice Aitor, tengo un sentimiento de pertenencia mucho más grande del que había tenido nunca. Para mí es súper especial.
Dicen que hay tres grandes momentos en la vida para hacer amigos: en el colegio, en la universidad y cuando tienes hijos ¿Es así
-Sergio: Claro, los niños tienen que socializar y, nosotros, por presión, terminamos por socializar también (sonríe).
-David: En nuestro caso es así. Ritxar y yo nos conocíamos de antes, pero no era con quien más relación tenía y ahora, en cambio, tanto como él como los demás, a los que antes no conocía, son personas imprescindibles en mi vida.
¡Os habéis convertido en una auténtica familia!
-David: Sí, totalmente.
-'Santotxu': Y además de nosotros siete, no podemos olvidarnos de Óscar, que es uno más de Muxutrock. Es quien nos deja la bajera. Ha estado con nosotros desde siempre y tenemos que agradecérselo todo a él.
-David: Tenemos una unión y una hermandad impresionantes. Hemos pasado juntos por bodas y por muertes, nacimientos, separaciones, etc. Hace siete años casi ni les conocía y ahora no entiendo la vida sin ellos. Para mí esta gente (dice mirando a sus compañeros) es mi segunda familia.
¿Por qué os llamáis Muxutrock?
-David: Por hacer un juego de palabras con 'musutruk', que significa "dar algo a cambio de nada" y 'rock', porque hacemos versiones de canciones de rock’n’roll. Cuando montamos el grupo decidimos tocar pero con fines solidarios.
-David: Nuestro objetivo era y es dar todo lo que conseguimos con los conciertos a causas benéficas. El 100% del dinero que ganamos lo donamos a asociaciones como la de Esclerósis Múltiple, la de Espina Bífida, el Grupo de Enfermedades Raras de Navarra, Zaporeak, Goizargi… Mi mejor amigo padece esclerosis múltiple y me parece fundamental la labor que hacen estas asociaciones.
Entonces tocáis de forma totalmente desinteresada….
-David: Bueno, en realidad recibimos como pago la energía y la ilusión de la gente que viene a vernos. Eso es una pasada.
-'Santotxu': Es muy bonito ver desde el escenario a tu gente. Te llena de emoción completamente el estar ahí.
-David: Y ya cuando la gente sabe que hay algo social detrás, todavía se implica más y se crea una atmósfera muy especial. Además, luego, cuando ves el trabajo que hacen las asociaciones, como la Asociación de Esclerosis Múltiple, es increíble. Una vez estuve en sus locales con los cuidadores y los enfermos y me llevaron a una gimnasio lleno de espalderas, balones medicinales, de pilates, etc, y me dijeron que la habían construido con el dinero que habíamos recaudado ese año en los conciertos y que la usaban todas las semanas más de veinte personas.
-Ion Ander: Hay veces en los que se nos acercan personas que forman parte de estas asociaciones a agradecernos lo que hacemos y nos sentimos abrumados.
-Santotxu: Sí, recibimos muchos abrazos y mucho cariño de la gente.
(Ponemos en valor el trabajo del tejido asociativo de Navarra)
¿Es difícil conciliar el rock con la familia?
-David: No, porque nosotros podemos decidir dónde y cuándo tocar, por qué causa… Y siempre anteponemos la familia a un concierto. Si uno de nosotros tiene un cumpleaños y le viene mal tocar esa noche, pues no tocamos.
-Aitor: De hecho, en julio y agosto, que es una época de muchos conciertos, nosotros estamos de vacaciones o en el pueblo con los hijos (risas).
-'Santotxu': Cada año hacemos unos diez o doce conciertos en total.
¿Asisten vuestros hijos a vuestros conciertos?
-Aitor: Sí. Incluso Saioa, la hija de 'Santotxu', tocó con nosotros durante un tiempo.
-'Santotxu': Sí. Tengo fotos de los dos tocando y para mí fue una experiencia inigualable.
¿Y cómo lleváis la disciplina de los ensayos?
-David: Cuando hay que tocar ensayamos un par de días antes.
-Aitor: El rato de ensayar y los días de concierto son nuestros momentos, y más los valoramos cuando tienes críos y están en casa todo el día corriendo por todos lados y tienes que andar detrás de ellos. Esos días son únicos (sonríe).
Bueno… Más allá de la música, ¿a qué dedicáis vuestro tiempo libre? ¿Os gusta hacer deporte?
-David: Yo he jugado durante mucho tiempo al fútbol, pero ya no lo practico. Me encanta el deporte, pero me encanta verlo (sonríe). Disfruto sobre todo siguiendo a Osasuna, que para mí es pasión. Fui socio muchos años, pero dejé de serlo cuando nacieron los mellizos. Eso sí, no me pierdo un partido, es de emoción máxima. Además del fútbol, también me gusta mucho el tenis y el baloncesto.
-Ion Ander: A mí lo que me gusta más es salir con la moto de vez en cuando. Tengo una de 800cc de Trail. Lo malo es que no puedo salir demasiado, porque al final los hijos, a cierta edad, condicionan bastante lo que haces…
-'Santotxu': Yo suelo salir a correr dos o tres veces a la semana, pero solo por mantenerme en forma. No compito en carreras in nada de eso.
-Sergio: Y yo pues parecido. Hago algo de ejercicio moderado. Voy a la piscina, hago yoga en casa y poco más.
¡Los conciertos os sirven para hacer ejercicio! (risas)
-Aitor: Bueno… Ion Ander y yo, menos, porque los vientos tocamos en la mitad de las canciones nada más (risas).
-'Santotxu': A ver, nosotros acabamos ‘mataos’ porque los conciertos son muy largos y nos movemos mucho. De hecho sudamos un copón (risas).
-David: Yo no paro. Hay muy pocas canciones en las que no me esté moviendo todo el rato. A lo mejor uso tres o cuatro gorras por concierto porque las empapo en sudor (sonríe).
-Sergio: Yo siempre voy con una camiseta de repuesto seguro, porque si no me cambio después, mal.
¿Y qué más aficiones tenéis? ¿Os gusta viajar? ¿Tenéis algún plan especial de vacaciones que no pueda fallar?
-David: Lo que más me gusta en el mundo es San Fermín. No hay nada mejor. No he faltado ni un día de mi vida a los ‘sanfermines’ desde que nací y creo que no faltaré jamás. En mi casa, desde pequeño, siempre he visto el ambiente de San Fermín y yo soy de los que se coge vacaciones siempre en estas fechas. Cuando los críos eran pequeños me preguntaban qué iba a hacer y yo les decía que 'sanferminear'. Para mí nuestras fiestas son lo más. Tiene que ocurrir algo de fuerza mayor para que yo me pierda un día de fiesta.
-Aitor: Nuestro objetivo para 2023 es irnos a tocar fuera. Tampoco hace falta irnos muy lejos. Para nosotros sería un planazo tocar en Donosti un viernes y pasar el fin de semana allí para poder disfrutar de esa ciudad, que siempre tiene planes interesantes para hacer. Ahora acaba de terminar el Festival de Cine, por ejemplo. (El Zinemaldi se ha convertido en una cita ineludible para todo amante del séptimo arte. Te contamos todo sobre su edición número 70)
¿Y alguno de vosotros tiene especial mano para la cocina?
-David: A mí me encanta cocinar y de hecho estudié cocina en Burlada. Ahora, con la cuadrilla, tenemos una sociedad gastronómica que se llama Buztintxoko en la que disfruto preparando el menú para los colegas. Me gusta mucho ponerme música de fondo y cocinar tranquilo.
-Ion Ander: ¡Pues a ver si lo vemos! (risas) Ya te haremos disfrutar haciéndonos la comida porque a mí me gusta cocinar también, pero no tanto como a David. (Los beneficios de formar parte de una sociedad gastronómica)
¿Cuál es vuestro plato estrella?
-David: Últimamente nos ha dado por hacer rodaballo asado al estilo Orio. Pero también tienen fama las paellas de 'Santotxu'. De hecho se habla más de lo ricas que le salen, que de cómo cocino yo en general.
-'Santotxu': Pero eso es por un día que me salieron muy bien (risas). (Te contamos paso a paso cómo hacer un rodaballo asado al estilo Orio)
¿Y si hablamos de 'pelis'?
-Aitor: Las de Disney me las sé todas (Ríen todos alrededor). ¡Incluso sus diálogos!
-David: Yo soy muy aficionado al cine y principalmente a los documentales. Igual que con los libros, me gustan mucho las películas sobre temas históricos, sobre todo de la Segunda Guerra Mundial. Hay una serie documental que me encanta que se llama 'Apocalipsis', que transcurre entre la Primera Guerra Mundial y la Guerra Fría.
¿Os gusta la lectura?
-David: Sí. A mí me encanta leer. Sobre todo novela histórica y policíaca. Me gusta mucho la trilogía de 'Reina Roja', 'Loba Negra' y 'Rey Blanco' de Juan Gómez Jurado. Otro libro que me parece buenísimo es 'El apicultor de Alepo', que me lo dejó mi amiga Ana, de Zaporeak, y trata sobre una familia de Siria que huye durante la guerra y habla de lo que encuentran al salir de su país hasta encontrar su camino. Es una pasada de historia. Más para mí que estoy muy implicado con el tema y me remueve mucho.
-'Santotxu': A mí también me gusta mucho la novela histórica.
-Aitor: ¡Eso es porque tenéis tiempo! (dice con tono jocoso). A mí me gusta mucho la novela fantástica y me leí 'El nombre del viento', de Patrick Rothfuss, cuando nació Asier. Me encantó. Mi suegra me regaló la segunda parte, 'El temor de un hombre sabio', y me la he acabado ahora, después de once años (risas). Este verano he vuelto a leer, porque ya no se hunden los críos, ya flotan, así que ya he podido volver a leer (bromea). Tenía unas ganas tremendas de empezar la segunda parte, pero con los hijos no había momento para nada… (Profundizamos en una de sus recomendaciones literarias)
¿Podéis decir entonces que tener hijos os ha cambiado completamente la vida, no?
-Ion Ander: Exacto. Tener hijos te cambia la vida, siempre, pero como le decíamos al último de la cuadrilla que tuvo hijos: "Te cambia la vida, pero compensa". Hay que disfrutar y agradecer cada momento con ellos.
-'Santotxu': Ya llegarás a la adolescencia, ya… (risas)
-David: Pero eso porque tú -refiriéndose a 'Santotxu'- o yo lo tenemos más reciente, pero pasan los años y vas viendo que la vida son etapas. La paternidad es cañera, la mía lo fue, pero yo creo que si se lo preguntas a mi viejo ahora con 86 años pues te va a decir que sí, que lo fue, pero como en todo en la vida hay que pasar esos momentos.
