'Sense8', la producción de las hermanas Wachowski, artífices de la mítica saga de 'Matrix' y la película de 'Jupiter Ascending', es uno de los fenómenos más sorprendentes que ha producido Netflix en su corta pero intensa trayectoria. Ya que a pesar de haber sido cancelada por la plataforma, sus fans no cejaron en su empeño de conseguir que se reanudase, convirtiéndola en una serie de culto. Y es que no hubo peor momento para anunciar su cancelación, que coincidiendo justo con el final de la segunda temporada, en 2017, después de cosechar aún mejores críticas que con la primera, estrenada en 2015.

'Sense8' cruza las vidas de ocho personas que no se conocen y viven en distintas partes del planeta, pero comparten su fecha de nacimiento, el 8 de agosto. A un conductor de autobús africano, una bloguera americana transexual, un hombre alemán que roba cajas fuertes, una mujer de negocios coreana, un actor de telenovelas mexicanas o una joven fiestera islandesa se suman otros dos hombres misteriosos que completan este equipo de 'sensitivos'. A raíz de la trágica muerte de una mujer, que todos perciben a través de sueños o visiones, se encontrarán conectados mental y emocionalmente y serán capaces de sentir, ver y escuchar lo mismo, lo que les servirá para profundizar en sus orígenes y conocer lo que les separa y lo que les une. En su reparto destaca la actriz estadounidense Daryl Hannah y el valenciano Miguel Ángel Silvestre.

Dos iconos LGTBI

Además de la orginalidad de su trama, esta serie recibió muy buena acogida, porque explora temas como la política, la identidad, el racismo, la sexualidad, el género y la religión. Además, creó dos de los personajes LGTBI más populares de la década: Lito -interpretado precisamente por Miguel Ángel Silvestre- y Nomi - a quien da vida Jamie Clayton-.

Sin embargo, Netflix dio carpetazo a esta serie de producción propia, puesto que en esos momentos, cuando aún estaba despegando en diversos países, 'Sense8' no le salía rentable, ya que al rodarse en diversas ciudades, los costes de producción eran elevados. Terminó cerrando las tramas con una película especial de 150 minutos de duración, tal y como había propuesto a las hermanas Wachowski, que después de rechazar, accedieron a realizarla ante el clamor de los fans, aunque a muchos este final les pareció injusto y demasiado precipitado.