La plaza de Gipuzkoa dejará de acoger paradas de autobuses interurbanos, como en la actualidad, y estas deberán ser trasladadas a "otra ubicación". Así lo anuncia el escrito de alegaciones, aprobado ayer por la Junta de Gobierno de Donostia, al anteproyecto de concesión del servicio público regular de transporte de viajeros por carretera de las comarcas de Bidasoa Behea y Oarsoaldea así como sus conexiones con Donostia, elaborado por la Diputación.

El documento añade que los autobuses interurbanos tendrán que tener otro espacio como escenario de sus paradas a partir de otoño de 2023, aproximadamente. La propuesta municipal, que ya fue expuesta por el alcalde, Eneko Goia, a la diputada foral de Movilidad, Rafaela Romero, consiste en acondicionar el espacio compuesto por el parque del paseo de los Fueros y la plaza de España para acoger estas paradas.

Además, el Consistorio recuerda que algunas líneas deberán utilizar la estación de autobuses de Atotxa (la BI02 al aeropuerto de Hondarribia; la BI01 Donostia-Pasaia-Errenteria-Irun-Hondarribia); y la BI03, Donostia-Pasaia-Errenteria-Irun), "salvo que se tramite adecuadamente su excepción". Las demás líneas de las comarcas citadas deben tener una parada céntrica en Donostia diferente a la de la plaza de Gipuzkoa.

El rechazo a que la plaza de Gipuzkoa acoja la terminal de distintas paradas de autobuses (Errenteria, Pasai Antxo, San Pedro, Irun y el aeropuerto de Hondarribia) se fundamenta en el plan de movilidad Datorren Donostia, "que pondrá el foco en la mejora de la movilidad de peatones, ciclistas y ciudadanía usuaria del transporte publico", dice el escrito de alegaciones.

La transformación será "gradual y progresiva", añade, y comenzará con el cambio de sentido de circulación de las calles San Martín y Zubieta, que tienen lugar estos días. "Estos cambios de tráfico van a permitir la creación de una zona de prioridad residencial en el centro de la ciudad, a la que únicamente puedan acceder los vehículos de los residentes y autorizados, y evitará que el Centro se utilice como vía de paso de conexiones Este-Oeste", señala el Consistorio.

En torno al Topo

El Ayuntamiento expone que deberá "rehacer la red de transporte público existente incluyendo como elemento nuclear el Topo" y explica que para completar esta reordenación circulatoria es necesario realizar cambios en los itinerarios del transporte público urbano e interurbano así como en sus paradas.

Las alegaciones municipales a los planes forales de transporte interurbano se refieren también a la coordinación de los servicios interurbanos con los de Dbus, en aquellos casos en los que las líneas hace trayectos coincidentes.

El Ayuntamiento considera "interesante" mejorar algunos de ellos y coordinar los horarios para ello. Por ejemplo, propone tener en cuenta esta situación en la línea OR04, a Trintxerpe y San Pedro, y la L-38 de Dbus. De este modo se evitaría que ambos servicios "casi se solapen en el tiempo" y luego haya que estar una hora sin servicio.

También sugiere la mejora de la oferta de transporte en la avenida de Barcelona coordinado algunos servicios de Lurraldebus y Dbus.

Por otra parte, y a pesar de que el anteproyecto foral señala que quedarán "prohibidos" los trayectos internos de Lurraldebus por las calles de Donostia, ya que Dbus dispone de una mayor oferta urbana, el Consistorio cree que algunos sí podrían llevarse a cabo a petición municipal en determinadas líneas y horarios.

En su análisis del plan foral, el Ayuntamiento también señala que no considera adecuado que las líneas interurbanas sin parada en la calle Isabel II circulen por ella, ya que esta calle ha sido reformada para calmar el tráfico. El Ayuntamiento está analizando alternativas y las dará a conocer a la Diputación en cuanto las tenga concretadas, anuncia el escrito.