El edificio que albergó las oficinas de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) de Gipuzkoa, junto al puente de Garro, de Intxaurrondo, podría transformarse para acoger apartamentos para jóvenes y mayores. Así lo señaló el pasado miércoles el viceconsejero de Vivienda del Gobierno Vasco, Pedro Jáuregui, que anunció que su departamento está en conversaciones con el Gobierno de España, con la intermediación del delegado del Gobierno, Denis Itxaso, para que la operación pueda avanzar y sumar así nuevos alojamientos al listado de previsiones.
Según las primeras estimaciones del departamento, el inmueble podría acoger 40 apartamentos. Para ello, sin embargo, sería necesario transformar totalmente la construcción, que se encuentra cerrada y sin uso desde hace siete años, cuando las oficinas de Aemet se trasladaron al complejo de Pío XII después de varios requerimientos de la Inspección de Trabajo por la mala climatización del inmueble.
Así lo recuerda la delegada de Aemet en Euskadi, Margarita Martín, que explica que la construcción, con zinc y cristal, carece de ventanas y ni en invierno ni en verano, con aire acondicionado o calefacción, consiguió ofrecer a los trabajadores unas temperaturas dentro de los parámetros legales.
Ello motivó abundantes problemas y quejas sindicales. Se llegaron a medir 41 grados en el interior del edificio en verano, a pesar de la climatización, y 16 en invierno, con calefacción. Además, las facturas energéticas eran elevadísimas.
Por todo ello, cuando se construyeron las nuevas oficinas de la Policía Nacional junto al río Urumea, Aemet aprovechó para reubicarse en las dependencias que habían quedado libres en Pío XII y el inmueble quedó sin uso.
Antes de la pandemia, en 2019, responsables de Vivienda del Gobierno Vasco ya habían visitado la construcción vacía con el fin de analizar su posible transformación para acoger apartamentos. En diciembre tuvo lugar la última visita. Ahora, explican fuentes de Lakua, es necesario que ambas administraciones alcancen un acuerdo económico para el traspaso de la edificación.
En principio, el departamento de Vivienda pretende mantener la estructura del edificio para acondicionar en él los apartamentos, si llegan a un acuerdo económico con Patrimonio del Estado. De cualquier modo, la reconversión no será sencilla ya que el edificio fue creado para oficinas y necesita abrir ventanas. Además, sería necesario rehacer el interior en su totalidad.
La operación no es la primera que se gesta en torno a este inmueble que tuvo una vida útil de 17 años, a pesar de ser considerado un edificio inteligente y obtener un par de premios de arquitectura. También estuvieron interesados en él la fundación Aranzadi y la Cruz Roja, pero las normativas de Patrimonio del Estado solo permiten cederlo a otras instituciones, por lo que las fundaciones y oenegés no pueden aprovechar esta construcción.
EL LEGADO DE UNA FALANGISTA
El edificio construido para acoger las oficinas de Agencia Estatal de Meteorología en Gipuzkoa, y otros organismos públicos, se levantó en el solar donde se hallaba el edificio Etxaide Borda, un inmueble que fue cedido a la Falange Española Tradicionalista y de la Jons en el testamento de su propietaria.
La mujer donostiarra, que formaba parte de las "margaritas" de la Falange, como se conocía a la sección femenina de este partido por la insignia en forma de flor que lucían en la solapa, tenía hermanos exiliados que residían en el extranjero y legó el caserío al partido franquista. A la muerte de Franco, el inmueble, como el resto de propiedades de la Falange, pasaron a formar parte de Patrimonio del Estado.
Etxaide Borda llegó a acoger temporalmente las aulas del colegio de San Luis de Herrera, cuando se derribó a consecuencia de la construcción de la variante, en los años 70. Después se reconstruyó en Mendiolabe.
