- Los pisos turísticos situados por encima de las primeras plantas pueden ser ahora legales, después de que el Pleno del Ayuntamiento de Donostia aprobase ayer la reforma de las normas urbanísticas, que aceptan esta opción antes descartada en el Plan General.
Con los votos a favor del Gobierno municipal PNV-PSE y los del PP, el documento urbanístico se cambió para asumir las directrices de la ordenanza de pisos turísticos, que fue tumbada en los tribunales. Estos consideraron que la ordenanza no era el instrumento adecuado para regular la instalación de viviendas vacacionales, por lo que el Consistorio emprendió la modificación de las normas urbanísticas, que asumen también otras condiciones, que estaban en suspenso tras la anulación de la ordenanza.
Los grupos municipales de EH Bildu y Elkarrekin Donostia, que han defendido mantener la norma anterior del Plan General que no permitía viviendas vacacionales más allá de los primeros pisos, criticaron ayer duramente la reforma aprobada, que supone autorizar cerca de medio millar de pisos turísticos que, antes, con el Plan General primitivo, no serían legales. En Donostia hay ahora unos 1.200 pisos turísticos con permiso del Ayuntamiento.
La portavoz de EH Bildu, Reyes Carrere, aseguró que estas viviendas vacacionales son "en su mayoría propiedad de empresas" y añadió que tienen un gran efecto en la carestía del precio de los alquileres. "No es la única causa del aumento de los precios pero sí la más importante", sentenció la corporativa.
Por su parte, la concejala de Elkarrekin Donostia Haizea Garay lamentó el "uso especulativo" de las viviendas y aseguró que este tipo de oferta "agrava la emergencia habitacional" de una ciudad "amenazada por los fondos buitres" y el Ayuntamiento opta por ser "más permisivo".
La concejala de Urbanismo, Nekane Arzallus, por su parte, señaló que con la ordenanza de pisos turísticos, el Ayuntamiento ha regulado la situación y ha cerrado un buen número de ellos. Asimismo, añadió que "la mayor parte de los juicios que tiene ahora el Ayuntamiento son precisamente por ese motivo".
Los cambios en las normas urbanísticas del Plan General también incluyen la posibilidad de dividir en dos viviendas de menor tamaño que antes. En concreto hará falta que los pisos tengan unas dimensiones mínimas de 110 metros cuadrados, además de otras condiciones, para adaptarlos así a los tamaños que se demandan actualmente.
Esta medida cuenta con el apoyo de todas las formaciones políticas del Pleno, al igual que la decisión de endurecer la transformación de edificios enteros en hotel y la de permitir que los antiguos edificios puedan añadir balcones si técnicamente es posible y se cumplen otras condiciones. Además, en las nuevas viviendas, la construcción de balcones no computará como construido.
EH Bildu y Elkarrekin Donostia sostienen que las viviendas turísticas "agravan la emergencia habitacional" de Donostia
