os 51 fragmentos de la escultura de Cristina Iglesias volaron ayer con destino a la isla de Santa Clara en helicóptero desde el Paseo Nuevo y fueron depositados cuidadosamente en una campa situada junto a la casa del faro, en plena remodelación para acoger la creación artística. Los 45 saltos de la nave comenzaron a las 6.30 de la mañana y tres horas después finalizaron. La artista y el alcalde, Eneko Goia, acudieron al lugar para comprobar in situ cómo se desplazaban las piezas, que estaban embaladas y numeradas.

La obra escultórica de Iglesias ha sido construida en Alfa Arte, de Eibar, y tras su montaje ha sido vuelta a desmontar para su traslado a su hogar definitivo. El helicóptero fue transportando las piezas, de distintos tamaños. Las mayores pesaban entre 1.200 y 1.350 kilos, el tope máximo que podía transportar.

No solo se llevaron hasta la isla los fragmentos de bronce con relieves que conformarán la vasija escultórica. También viajaron las piezas que compondrán la pasarela que se instalará en el interior del edificio, un paso que permitirá a los visitantes contemplar desde arriba el fluir del agua en la escultura hundida.

El alcalde, Eneko Goia, se mostró muy satisfecho por este nuevo momento de la obra y señaló que el traslado "cumple otro de los hitos, quizá uno de los más importantes hasta la fecha" del proceso de creación. El primer edil aseguró que la obra va bien en plazos aunque avanzó que la apertura al público podrá tener lugar en primavera (en lugar de en otoño como se previó en un primero momento). "Vamos bien de plazos y de fases, teniendo en cuenta que las inclemencias meteorológicas no permitieron avanzar lo deseado durante enero y febrero y el parón provocado por el confinamiento también han ralentizado los trabajos", manifestó. "La obra podría finalizar a finales de año, de tal modo que puede ser plenamente visitable en primavera de 2021, una época que nos permitirá organizar una apertura acorde a la importancia que va a tener esta obra para la ciudad, que sin duda va a ser un referente internacional en el mundo de la escultura y el arte", añadió.

Por su parte, Iglesias se mostró muy "emocionada y contenta" de ver el avance de su actuación y explicó que a partir de ahora se irá montando la escultura en su hueco. Habrá que soldar las piezas y "maclarlo", señaló, en alusión a la tarea de crear los cristalitos que aparecerán en las piezas de bronce imitando a los que surgen en la naturaleza.

Asimismo, la artista donostiarra de renombre internacional destacó "el buen trabajo que están realizando todos los equipos implicados". "Una vez trasladados todos los elementos hay que colocarlos, poner la pasarela, la cubierta, finalizar el interior que lleva alabastro en las ventanas, trabajar la luz, hacer las pruebas de agua€ Son trabajos que se realizarán en lo que queda de verano y parte del otoño", explicó la artista.

Como en otras comparecencias sobre la obra de la isla, el alcalde fue interrogado por la fórmula elegida para que los ciudadanos puedan desplazarse hasta la isla a contemplarla, aunque aún no ha sido concretada. "Iremos viendo", señaló. Iglesias, por su parte, también destacó su alegría por el hecho que la isla no se ha cerrado al público en ningún momento de la obra, con excepción de la zona acotada, y señaló que seguirá así.

Piloto fallecido. La escultora Cristina Iglesias dedicó ayer un "emocionante recuerdo" al piloto donostiarra Haritz Galarraga, fallecido recientemente en Lleida en accidente de vuelo junto a su compañero Jordi Figueras. Galarraga tenía previsto llevar a cabo ayer el transporte de las piezas de la escultura para la isla. Junto al alcalde, Eneko Goia, dedicaron un recuerdo al piloto y ofrecieron un ramo de flores a los familiares, invitados especiales en el acto. "No está aquí pero es lo que quería hacer", destacó la artista.

"Hay que colocar los elementos, poner la pasarela y finalizar el interior del edificio"

Escultora

"La obra será visitable en primavera de 2021 y haremos una apertura acorde a su importancia"

Alcalde de Donostia