donostia - La pasada fiesta de San Sebastián fue "redonda", "más para los de casa" y "sobresaliente". Estas son algunas de las calificaciones del alcalde, Eneko Goia, en su balance de ayer sobre el día de San Sebastián, en el que destacó también "la alta participación, la emoción y el respeto" con los que se desarrollaron los actos. Además, la fiesta discurrió sin incidencias reseñables, según recalcó, y con menos gente que el pasado año ya que cayó en lunes, en vez de en fin de semana, como en 2019 y 2018.

De cualquier modo, las multitudes fueron la tónica general en una jornada que sacó a 25.000 personas a la calle solo para presenciar la Tamborrada Infantil, con más de 4.800 escolares participantes. Otros miles de personas, difíciles de computar, se sumaron también a las 151 tamborradas de adultos que alegraron la jornada por todos los rincones de la capital guipuzcoana, con el aliado del tiempo que, aunque frío, fue seco y sin viento.

Las aglomeraciones festivas se tradujeron también en un uso intensivo de Dbus, que contabilizó 122.823 viajeros, 50.000 más que en un festivo cualquiera y algo menos que el pasado año, cuando la fiesta fue en domingo y se registraron 157.000 usuarios. El pasado lunes, además, se anotaron un 12% más de usuarios que los 110.000 de 2014, la última vez que San Sebastián se había celebrado en lunes.

La plaza de la Constitución estuvo a reventar de gente, con unas 6.000 personas en la Izada, un millar menos que en la Arriada, también multitudinaria. En este acto de fin de fiesta protagonizado por la Unión Artesana, el tablado instalado en el lugar acogió a 375 personas (sin contar informadores), más incluso que en la Izada, con la sociedad Gaztelubide, cuando hubo 333.

El regidor donostiarra, que estuvo presente en todos los actos del programa oficial del día de San Sebastián destacó "la emoción" suscitada entre las compañías de la Tamborrada Infantil cuando las deportistas de fútbol y hockey de la Real Sociedad accedieron a la casa consistorial para recibir el Tambor de Oro pasando por las tropas escolares. También subrayó la emoción del presidente de la Real Sociedad, Jokin Aperribay, y el homenaje a Tomás Hernández Mendizabal, autor de 50 Tambores de Oro, en la entrega del de este año, diseñado por primera vez por Iñigo Arístegui.

El mandatario recalcó el buen ambiente que se vivió ya desde la víspera de la fiesta, cuando las tamborradas infantiles de Kresala y Gaztelubide calentaron el ambiente. Asimismo, destacó el homenaje tributado en la Izada al músico Jose Mari Oiartzabal, que dirigió a los músicos en varios temas de la fiesta.

Finalmente, Goia quiso destacar algunos "aciertos" de la fiesta, como la nueva bandera específica bordada para la Unión Artesana en su 150º aniversario, que "pesaba mucho más" que en anteriores. Melodías como Ixil ixilik dago, interpretada en la Arriada, fue otra de las novedades positivas, a juicio del alcalde.