- La difusión del patrimonio documental es la base del proyecto conjunto que han alumbrado el Consistorio de Oñati y diversas asociaciones con la colaboración del Archivo Histórico Provincial de Gipuzkoa. Los dos manuscritos que el cura y escritor oñatiarra Manuel Umerez Goribargoitia (1757-1818) dedicó a su sobrino (1805) y a un amigo agricultor (comienzos del siglo XIX) han sido digitalizados, poniéndolos al alcance de todos los interesados en profundizar en dos obras de temática religiosa-moral que destacan por ser una importante fuente para el conocimiento del euskera de Oñati.

Los conocidos como manuscritos Arrazola-Umerez, de los que Jerardo Elortza da cuenta en sus trabajos, se conservan entre las cuatro paredes de la casa de los Arrazola del barrio de Olabarrieta. Su propietario, José Ramón Arrazola, no dudó en aceptar la propuesta de digitalización de estas dos joyas escritas de más de 400 páginas cada una. El Ayuntamiento ha llevado a cabo esta iniciativa a petición de las asociaciones Artixa y Gure Bazterrak, el euskaltegi municipal y la biblioteca.

"Es cierto que el autor era sacerdote y que las cuestiones religiosas tienen un peso importante. Pero se aporta mucha información sobre el modo de vida de aquella época; la vestimenta, las costumbres, el chocolate, los caseríos, la educación de los hijos... ", detalló en la presentación el filólogo e investigador de la UPV, el eskoriatzarra Oxel Uribe-Etxebarria, que aborda en su tesis el estudio de estos manuscritos.

Hasta el 9 de abril el Archivo Histórico expone los originales al público en su horario de apertura, mientras que la versión digitalizada puede descargarse en las web del ayuntamiento y del propio archivo.