ras quedar suspendida el pasado año, el Ayuntamiento de Eibar ha incluido en el Plan Estratégico de subvenciones para 2021 la Beca Mercedes Kareaga, promovida por el PNV con el objetivo de “documentar y destacar la importancia de la contribución de las mujeres eibarresas al progreso de nuestra ciudad”. Todo ello, “para que el ejemplo de Mercedes y sus valores sirvan de motivación tanto a la generación actual como a las futuras”, explica la edil jeltzale de Igualdad, Elena Ibañez.

En cualquier caso, con la creación de esta nueva beca el Consistorio armero no solo contribuirá a visibilizar el indiscutible papel protagonista desempeñado por las mujeres en el desarrollo de Eibar; también saldará una deuda que tenía pendiente con Mercedes Kareaga Guisasola (1908-1997); una eibarresa que dedicó su vida al desarrollo de organismos y actividades destinadas a cubrir necesidades de igualdad e integración social de personas desfavorecidas.

Una vida intensa

Hija de Emilia Guisasola y del grabador Cayetano Kareaga, Mercedes cursó sus primeros estudios en las escuelas de la Alhóndiga (allí recibió clases de Polonia Echeverría) y posteriormente estudió Magisterio, aunque nunca llegó a finalizar esos estudios.

Siendo muy joven, Mercedes Kareaga participó en la creación de la agrupación local del PNV y de su apartado femenino Emakume Abertzale Batza, desde donde defendió activamente la participación de la mujer en la sociedad, hasta que en 1933 abandonó la política.

Con el estallido de la Guerra Civil se vio obligada a abandonar Eibar. Inicialmente se refugió con su familia en Bilbao y después en Asturias, donde permaneció hasta que el Principado cayó en manos de los fascistas. Entonces decidió huir en barco a Francia, pero el buque en el que viajaba fue intervenido por el crucero Almirante Cervera de la armada facciosa y Mercedes fue devuelta a Eibar, donde permaneció bajo vigilancia.

De regreso a su ciudad natal, Kareaga participó en el reparto de ayuda alimentaria y en 1943 se sumó a la agrupación local de Acción Católica dando charlas y clases. Asimismo, impulsó una tómbola benéfica que sorteaba productos donados por las empresas eibarresas y destinaba el dinero recaudado a fines sociales; participó en la recaudación de recursos económicos para apoyar la formación de curas en seminarios y fundó (en 1951) la Sociedad Femenina Eibarresa Goi Argi; la primera sociedad femenina de España, que estuvo muy vinculada a la religión católica y realizó una gran obra social de educación con las mujeres y los más necesitados.

Además, Mercedes fue una de las impulsoras (en 1964) del Patronato Eibarrés de Beneficencia que se creó para ayudar en el proceso de rehabilitación a las personas afectadas por un brote de poliomielitis que tuvo lugar dos años antes y en 1973 creó los Talleres Protegidos Cayetano Careaga (hoy Gureak), destinados a facilitar el acceso al mundo laboral de jóvenes con discapacidad.

Considerada una de las eibarresas más importantes del siglo XX, Mercedes Kareaga fue una luchadora adelantada a su tiempo