- La Corporación de Deba aprobó en el Pleno del pasado jueves un presupuesto consolidado de 9.066.529 euros para 2021, lo que supone un espectacular incremento de 1.133.226 euros (un 12,49% más) respecto al presupuesto de 7.933.303 euros que la entidad local aprobó el 30 de abril del 2020 para el pasado ejercicio.

Las cuentas salieron adelante con el voto favorable de los concejales de EH Bildu (6) y de los representantes de Debarren Ahotsa (4), mientras que los ediles del PNV (3) votaron en contra.

Según la concejala de Hacienda, Itziar Irizar, la elaboración de los presupuestos, que contemplan destinar 1.090.562 euros a la Entidad Local Menor de Itziar (133.457 euros más que en 2020), “se ha basado en la toma en consideración de la situación creada por la pandemia; la adopción del Plan de Gobierno como hoja de ruta; el fortalecimiento de las comisiones de Políticas Sociales e Igualdad; la continuidad en el fomento del euskera y la recuperación, en la medida de lo posible, de las actividades culturales y deportivas; la previsión de acciones con impacto medioambiental; la consideración del plan de reactivación comercial de 2020 y la previsión de proyectos que mejoren el municipio”.

Por su parte, el alcalde, Gilen García aseguró que “en colaboración, hemos conformado un presupuesto equilibrado y potente que va a dar respuesta a la situación actual”.

Los presupuestos aprobados para este año contemplar destinar 850.000 euros para la realización de inversiones.

En este capítulo destacan las partidas para construir una cubierta en Luzaro (150.000 euros), para la acera de Artzabal (170.000 euros), para adecuar los caminos de San Roque y Santa Katalina (100.000 euros), acondicionar la calle Arrantzale (26.000), renovar las ventanas del Gazteleku (23.500), instalar luminarias Led en Errotazar (50.000), construir unas pistas de padel (120.000 euros), instalar unas redes en el frontón Aldats (6.000), renovar la web municipal (6.000) y restaurar las fachadas de Calbeton; unas obras a las que el Consistorio le corresponde destinar 100.000 euros por ser el propietario del frontón Euskal Jolas y de varios locales.

El grupo municipal jeltzale justificó su rechazo a la propuesta de presupuestos de EH Bildu “porque el gobierno municipal no ha querido incluir en las cuentas la gran mayoría de las propuestas que hemos planteado y que consideramos prioritarias y porque apreciamos un importante problema de gestión en el Ayuntamiento”. En este sentido, desde el PNV afirman que los actuales gestores locales “muchas veces no son capaces de llevar a cabo proyectos comprometidos”. De hecho, afirman que “así ha sido en 2020; lo que ha hecho tener que trasladar proyectos no terminados a este año”.

En la misma linea, los jeltzales no entienden que el Ayuntamiento haya terminado el ejercicio 2020 con un remanente de 800.000 euros ( casi un 9% del presupuesto total). A su entender, “no podemos encontrarnos con esto al cierre del ejercicio, ya que denota que los controles que se realizan en cada área no son adecuados y que la capacidad de gestión es insuficiente”.

En opinión del PNV “el partido que gobierna es el que tiene la responsabilidad de que la gestión se realice correctamente y un ejercicio de autocrítica sería interesante de cara a corregir actuaciones que están dificultando el avance”.