- El Ayuntamiento de Irun ha licitado el proyecto de construcción de la segunda fase del centro cultural Carlos Blanco Aguinaga (CBA) con un presupuesto de 3,8 millones de euros y un plazo de ejecución de doce meses. Se trata de una de las principales inversiones del año en la localidad bidasotarra, con la que se busca ampliar el espacio con el que cuenta la instalación situada en el subsuelo de la plaza San Juan y que alberga la biblioteca municipal.

Esta segunda fase plantea incorporar un espacio de 2.400 metros cuadrados en la parte del subsuelo de San Juan más cercana a la casa consistorial, inocupados desde la reurbanización del entorno a la espera de que se aprobase el proyecto de ampliación del CBA. Ese momento ha llegado y, una vez se cierre el concurso, la infraestructura ganará nuevas áreas con usos diversos, pero centrados en la cultura.

En ese sentido, la sala que centra la actuación es un auditorio polivalente de tamaño medio, con un aforo variable para entre 91 y más de 300 personas según la disposición de las butacas, que podrán moverse en función del espectáculo para crear distintos ambientes.

La directora técnica del área de Cultura, Eunate Encinas, destacó ayer de este auditorio que se trata de una novedad en la ciudad por sus dimensiones: "Tenemos el Amaia con 600 localidades, tenemos la sala Puerto que se utiliza en el museo Oiasso para encuentros más pequeños, pero nos faltaba una sala para eventos de tamaño medio". Así, ese espacio ofrecerá a Cultura la posibilidad de programar propuestas artísticas en formatos hasta ahora inéditos en Irun.

Además de esa sala destinada a las artes escénicas, la segunda fase del CBA prevé otros usos como la ampliación de la sala de estudios de la biblioteca y un área abierta que servirá de "plaza", haciendo de nexo entre el auditorio y el resto de salas. Dicho espacio también busca ser un área polivalente para albergar exposiciones en formatos clásicos, pero también alternativos. Asimismo, se prevén nuevas salas de trabajo para acoger reuniones y otras actividades, así como una zona para el servicio Gazteartean del área de Juventud.

El alcalde de Irun, José Antonio Santano, destacó ayer esta inversión desde la perspectiva del urbanismo, recordando la "revolución" que supuso la apertura del CBA hace siete años en pleno centro de la ciudad en un espacio que no existía antes de la reurbanización de San Juan. "Normalmente las ciudades tienden a ocupar espacios en sus centros urbanos y nosotros hemos creado uno nuevo donde antes no había", aseveró el primer edil, que cree que la segunda fase es "la pata" que le faltaba al CBA para completarse como infraestructura.