Irun vivió ayer, por segundo año consecutivo, un 29 de junio sin ningún acto festivo. Fue, y es doloroso admitirlo, un día más. Un día de San Pedro, sin misa mayor en la parroquia del Juncal, sin el Aurresku de los miembros de la Corporación municipal y, sobre todo, sin las revistas de armas que los generales de los Alardes tradicional y público realizan a todas las compañías la jornada previa al desfile como último preparativo para que todo salga bien el día de San Marcial.

Aunque los más sanmarcialeros ya pudieron disfrutarlo la noche del pasado lunes, con lo que muchos irundarras se despertaron ayer fue con el discurso que el general del desfile tradicional, Paco Carrillo, había preparado para las fiestas de este año. En un pequeño vídeo de poco más de tres minutos, que puede encontrarse en las redes sociales de Irungo Alardea, Carrillo llama a "mirar hacia adelante" para evitar sucumbir "al terrible abrazo de la melancolía" que evoca la suspensión del Alarde por segundo año a muchos irundarras.

A pesar del tono solemne, el discurso del general transmite una buena dosis de esperanza y explicita "la profunda determinación de renovar fielmente el voto" a San Marcial por parte de la Junta de Mandos, que lo hará hoy, en un acto privado, en torno a las 8.25 horas.

"Sentimos ya cerca el final de este sombrío paréntesis y sabremos, como hemos sabido siempre, aguardar pacientemente, con la responsabilidad que nos ha venido caracterizando, el momento de dar rienda suelta al jubiloso estallido de nuestra alma, deseosa de celebración, de cercanía, de abrazos y de emoción", expresa Carrillo en el audiovisual, haciendo una apología implícita de la mesura en las festividades de este 30 de junio.

En la segunda parte del mensaje, el general se centra en lo que vendrá en 2022. "La historia nos lo debe y ya lo tenemos al alcance de la mano", continúa Carrillo, invitando a la ciudadanía de Irun a prepararse "desde hoy" para el desfile del año que viene, que supondrá, además, el quinto centenario de la batalla del monte Aldabe de 1522: "Lo vamos a hacer inolvidable".

"Es desde esta perspectiva, desde el íntimo convencimiento de que comenzamos ya a cerrar este triste paréntesis, desde donde quiero expresar mi más conmovido agradecimiento, y el de la absoluta totalidad de la Junta de Mandos y la Junta del Alarde, a todas aquellas personas, muchas y muy diversas, que, a pesar de las penosas circunstancias que nos ha tocado vivir, han hecho de su devoción sanmarcialera el motor que las ha impulsado a cumplir eficaz y calladamente con las múltiples obligaciones y tareas que nuestra querida fiesta requiere, incluso en tiempos de suspensión", añade el general como colofón, agradeciendo "de todo corazón" la "afable comprensión, responsabilidad y empatía" de todos los irundarras. Carrillo finaliza su discurso con un mensaje de ánimo para afrontar "el último acto del drama humano de la pandemia".

El responsable del Alarde tradicional llama a trabajar "desde hoy" para preparar el desfile de 2022, el del quinto centenario