on el ánimo de facilitar el estacionamiento de vehículos de residentes, el Ayuntamiento de Irun ampliará en los próximos meses las regulación del aparcamiento a través de OTA a los entornos de Arbes, Palmera Montero y Belaskoenea. A finales de enero la Junta Local de Gobierno sacó a concurso el nuevo contrato de la OTA con la previsión de que se adjudique y pueda entrar en vigor en torno al mes de abril, cuando finalice el vigente. Los nuevos pliegos contemplan un presupuesto anual máximo de 1,8 millones de euros para el servicio.

El delegado de Movilidad, Borja Olazabal, dio a conocer ayer los detalles del nuevo contrato explicando que, aunque sigue un esquema muy similar al actualmente en vigor, contará con una duración menor, de dos años, con la posibilidad de prorrogarse durante uno más. La causa de esta reducción en el tiempo es el estudio que el Consistorio tiene previsto llevar a cabo en los próximos meses sobre la posibilidad de remunicipalizar el servicio de OTA, fruto de una enmienda de Elkarrekin Podemos-IU a una modificación de créditos debatida en Pleno en octubre de 2019.

Además de esta singularidad, la principal novedad que presenta el contrato es la incorporación al sistema OTA de varias zonas, decisión que “responde a demandas de los vecinos”, como puntualizó Olazabal. En el caso de Belaskoenea, aunque una parte del barrio, la más cercana a Pío XII, ya estaba en el sistema, la OTA se extenderá próximamente a la mayor parte de los aparcamientos de la zona, llegando hasta las calles Burniola y Lavanderas y pasando por Arturo Campion, Alberto Larzabal o Navegantes, entre otras vías.

En cuanto a Arbes y Palmera Montero, los sucesivos estudios de ocupación de plazas de aparcameinto realizados en el área entre 2017 y 2018 han tenido un gran peso en la decisión de regular el estacionamiento. Así, Olazabal recordó que durante la realización de estos trabajos se observó una gran ocupación de las plazas de estacionamiento en la zona (superior al 80% prácticamente en todo momento). Además, tras el análisis de las matrículas, los estudios concluían que solo en torno a la mitad de los vehículos eran de residentes, mientras que un 20% eran de vecinos de otras partes de Irun y casi el 30% restantes de personas de fuera de la ciudad.

Por ello, con la intención de incentivar la rotación de vehículos, la OTA también aterrizará en esta parte de la ciudad afectando a calles como Bertsolari Uztapide, Arbesko Errota, Uranzu, Juan Vollmer o Juan Thalamas Labandibar.

Entre las líneas principales del contrato también se mantienen las cuatro tipologías exintentes en las plazas reguladas: las zonas azules, destinadas a estancias cortas de dos horas como máximo; las verdes, con una duración máxima de cuatro horas y media; las rojas, gratuitas hasta un máximo de tres horas tras obtener el tique correspondiente, y las blancas, solo para residentes.

Olazabal hizo hincapié en que todo este planteamiento se realiza “con el nuevo Plan de Movilidad Urbana Sostenible en el horizonte”, que también atenderá las cuestiones relacionadas con el aparcamiento en la ciudad. Igualmente, el delegado incidió en que el Ayuntamiento está trabajando para crear más plazas de aparcamiento en superficie en el entorno de Palmera Montero y Arbes con actuaciones como la ampliación del parking de Bienabe Artia o el futuro proyecto de Belartza.