Azpeitia recreará en madera y a tamaño real el Guernica de Picasso

El 26 de abril de 1937 los aviones de la Legión Cóndor alemana y la Aviación Legionaria italiana, aliadas del ejército franquista, bombardearonGernika, llevando el horror y la muerte a una localidad que había iniciado el día ajena al drama que estaba por venir, animada por la celebración de un día de feria.

Un símbolo universal

El ataque ocasionó cientos de muertos y destruyó gran parte de la villa, símbolo de los fueros vascos.

Aquel bombardeo se convirtió en un hito trágico de la Guerra Civil y en un símbolo universal de la barbarie contra la población civil.

Casi 90 años después, el mensaje sigue tan vigente como entonces, tal y como recuerdan las imágenes de guerra, destrucción y muerte que cada día se muestran a través de los medios de comunicación.

Picasso

El pintor malagueño Pablo Ruiz Picasso no fue ajeno a la tragedia que vivió el pueblo de Gernika.

En 1937 presentó un cuadro del mismo nombre, “Guernica”, que vio la luz en el pabellón de la República española durante la Exposición Internacional de París.

Su composición en blanco y negro, unida a la presencia de figuras fragmentadas propias del estilo cubista, que agudizan la sensación de tragedia, drama y caos, causaron un enorme impacto. La obra se convirtió en un referente universal de la crueldad de la guerra y del dolor de las víctimas inocentes, un símbolo que, casi un siglo después, mantiene intacta su capacidad de sacudir conciencias.

El lienzo permaneció en Nueva York hasta el 10 de septiembre de 1981, fecha en la que el cuadro fue trasladado a Madrid.

Primero se instaló en el Casón del Buen Retiro (edificio anexo al Prado) bajo fuertes medidas de seguridad, protegido con un cristal antibalas, escolta policial, etc. Desde 1992 el cuadro puede ser admirado en el Museo Reina Sofía

Un reto ambicioso

Tomando como punto de partida el cuadro del pintor malagueño, un grupo de tallistas especializados en el trabajo con la madera se ha embarcado en un ambicioso proyecto bajo el nombre de “Egurnika”, que se presentará en el centro cultural Sanagustin Kulturgunea de Azpeitia el próximo 11 de diciembre, a partir de las 19.30 horas.

El nombre responde a un juego de palabras en euskera que une las palabras madera y Gernika, y define de forma clara cuál es el objeto final del proyecto: recrear en madera el cuadro pintado por Pablo Picasso.

A este reto se suma otro no menos exigente, como es el de tallar la obra respetando fielmente sus dimensiones originales, 3,49 metros de alto por 7,77 metros de ancho, lo que convierte el trabajo en una empresa de enorme complejidad técnica y artística.

Manolo San Juan

Detrás de esta obra hay también un reconocimiento a la labor del tallista Manolo San Juan, fallecido en 2023.

Entre los muchos proyectos que tuvo a lo largo de su vida se encontraba el de tallar en madera y a tamaño real el cuadro de Picasso.

Sin embargo, aquel sueño no pudo hacerse realidad. Ahora, su hijo Mikel San Juan, junto a un grupo de artesanos de la escuela de talla ADI (Arte eta Diseinu) de Azpeitia, ha recogido su testigo para convertir en realidad aquella idea que quedó pendiente.

Un proyecto a largo plazo

El objetivo de este grupo de tallistas es ir avanzado en la materialización del proyecto con la mirada puesta en el año 2037, fecha en la que se prevé presentar la obra ya finalizada, coincidiendo con los 100 años del bombardeo de Gernika.

Por delante queda un largo periplo de más de 10 años que servirá también poner en valor la tradición de tallistas de la madera que ha tenido Azpeitia a lo largo de su historia. Este tiempo se aprovechará también para organizar visitas con el fin de dar a conocer el trabajo de la talla en madera a medida que la obra va tomando forma.