“Plantear un impuesto por tener un perro en Eibar me parece una medida que busca chuparnos el dinero”
Eider Anguera, voluntaria de Marcan Huella, forma parte de esta asociacion canina desde su fundación y es testigo de la evolución de la convivencia entre animales y personas en la sociedad, un camino en el que se ha avanzado mucho pero en el que aún hay pasos importantes que dar
Marcan Huella vio la luz en Eibar en 2014 como una asociación protectora centrada en la atención a los perros o “peludos”, como les llaman sus miembros. Eider Anguera es voluntaria de esta asociación desde sus orígenes y ha sido testigo de los cambios que ha vivido la sociedad en su relación con los animales y, más en concreto, con los perros. Su presencia cada vez más habitual en los hogares y en las calles responde a un cambio social en el que el perro ha pasado a ser un miembro más de muchas familias En ese contexto, colectivos como Marcan Huella juegan un papel destacado en la atención y la integración de los perros en la sociedad, dando pasos en un camino en el que se ha avanzado mucho pero en el que, tal y como indica Eider Anguera, todavía queda mucho por recorrer.
¿Cuál fue el origen de Marcan Huella?
Un grupo de amigos y conocidos que teníamos perros acordamos agruparnos para atender a nuestros “peludos”. Organizamos actividades para que socialicen y, además, desarrollamos campañas de protección, recogiendo perros abandonados y buscándoles un hogar.
¿Se siguen abandonando perros?
Afortunadamente, en esta zona cada vez hay menos abandonos, a diferencia de otros lugares del Estado en los que hay protectoras con decenas de animales bajo su custodia. Hemos llegado a tener 11 perros en situación de acogida a la vez pero en este momento no tenemos ninguno.
Hogares temporales de acogida
¿Cómo actúan cuando reciben un perro abandonado?
El primer paso es encontrar un hogar temporal de acogida hasta que alguien quiera hacerse cargo de él. Esta acogida no tiene ningún coste para el que se haga responsable del perro. La asociación paga todos gastos (vacuna, veterinario,...). Sólo se tienen que preocupar de dar cariño al animal. En otros casos, recurrimos a hoteles caninos hasta el momento de la adopción.
“La experiencia de los perros en la piscina fue un éxito, pero también hemos aguantado frases como ¡Qué asco! y ¡Qué cochinada!”
Supongo que todo ello tendrá un coste económico.
El gasto, al igual que en los casos de acogida, corre a cuenta de Marcan Huella. Por desgracia, tenemos problemas para encontrar hoteles caninos en Gipuzkoa. Prefieren perros para estancias cortas y, en estos casos, no sabemos cuánto tiempo permanecerá hasta el momento de la adopción. Han tenido problemas de pagos con algunas protectoras y eso les hace recelar. No es nuestro caso, pues siempre estamos al corriente de nuestras facturas. Esta situación no ha llevado a utilizar hoteles situado en Cantabria y en Navarra con el gasto y las molestias que supone desplazarse para verlos perros y gestionar las adopciones.
Una perrera en condiciones
¿La perrera de la Mancomunidad de Debabarrena no podría cumplir esa misión?
Tenemos muy buena relación con el responsable de la perrera. Hemos gestionado muchas adopciones con su colaboración, pero las instalaciones no tienen las condiciones para que los perros puedan estar bien a la espera de la acogida. Están ubicadas junto a los almacenes que guardan los equipos de recogida de basuras de la Mancomunidad y los animales no tienen espacio para correr ni jugar. Hace tiempo que los políticos hablan de construir un espacio pensado en el bienestar animal, pero no sé si lo llegaré a ver.
“La perrera de Debabarrena no tiene condiciones para albergar perros. Llevan años hablando de una nueva, pero seguimos esperando”
El pasado fin de semana, las piscinas de Eibar fueron el escenario de una jornada poco habitual, en la que se dio a los perros la ocasión de disfrutar de las instalaciones. ¿Cómo vivieron la experiencia?
Fue algo genial. Vinieron decenas de perros con sus dueños, y pudieron disfrutar de las piscinas, jugar entre ellos y socializar sin que hubiera ningún tipo de problema. La experiencia fue todo un éxito.
En esta ocasión ha sido un evento reservado únicamente a los perros. ¿Ve posible que algún día perros y personas puedan compartir espacio en la piscina?
No lo creo. Al lado de Eibar tenemos tres playas y no podemos ir a ellas con los perros en verano. Muchos dueños se quedan sin disfrutar de la playa por no dejar a sus mascotas solas en casa. De hecho, en el caso de las piscinas hemos escuchado comentarios del tipo “¡Qué asco!”, “¡Qué cochinada!”, cuando hablamos de unas piscinas que se van a vaciar y de una zona verde que se va a limpiar. ¿Dónde está el problema? Las instalaciones no se van a volver a usar hasta dentro de nueve meses y, aún y todo, hemos tenido que escuchar quejas.
Convivencia e impuestos
Detrás de esas quejas es evidente que hay un problema de convivencia entre perros y personas. ¿Ve alguna solución”
Todo radica en la responsabilidad. Igual que no dejas que un niño moleste haciendo ruido o jugando con un balón en un lugar que no corresponde, con los perros sucede igual. Hay sitios donde pueden estar bien, y otros donde no. Yo, personalmente, no iría de compras a unos grandes almacenes atestados de gente con mi perro o me metería en una zona de chiquiteo en la que hay cientos de personas. Sé que no va a estar bien. Prefiero que se quede en casa. Pero si una vez al año se organiza algo para ellos en una piscina, por ejemplo, ¿a quién le hace daño?.
Estos últimos días se ha dado a conocer que el Ayuntamiento de Eibar plantea implantar un impuesto para los dueños de perros. ¿Cómo valora la medida?
Me parece una pésima idea. Nos cobran impuestos pero luego no hay ayudas ni servicios. Tener un perro es algo muy caro. Se está convirtiendo en un artículo de lujo: los cuidados del veterinario, vacunas, IVA al 21%...todo suma. No recibimos ayudas, a pesar de que cada vez hay más familias que tienen perro. Ahora un impuesto. La verdad, la medida me parece solo busca chuparnos el dinero”