El Ayuntamiento de Arrasate renovará este otoño los ascensores públicos de Ferixaleku y Altamira, retirando por completo los actuales y sustituyéndolos por modelos más modernos que ofrecerán "mayor seguridad, accesibilidad y facilidad de uso". Se trata de una actuación incluida en los presupuestos de 2025, con un coste estimado de 176.000 euros (sin IVA).

El proyecto, actualmente en fase de licitación, contempla un plazo de ejecución de hasta cuatro meses, incluyendo tanto el desmontaje de las antiguas cabinas como la instalación y legalización de los nuevos equipos. Se espera que las obras comiencen a lo largo del otoño, una vez adjudicado el contrato.

Averías y vandalismo

Los dos elevadores que conectan El Ferial con Altamira, inaugurados a finales de 2009, fueron los primeros de uso público construidos en la localidad cerrajera. Esta infraestructura se ha convertido en un elemento clave para garantizar la movilidad entre los barrios altos del entorno, como Altamira, Aldaigain, Obenerreka, Makatzena (que también cuenta con sus propios ascensores) y Santamaina. No obstante, en los últimos años han sufrido un notable deterioro debido a su uso frecuente y a múltiples actos vandálicos, que ha provocado constantes averías.

Así, según se recoge en los pliegos técnicos, los nuevos elevadores estarán diseñados para un uso intensivo y contarán con protección especial contra el vandalismo, una de las principales problemáticas que han afectado a las actuales cabinas.

Capacidad para 13 personas

Además, ofrecerán mejoras técnicas importantes en accesibilidad y seguridad, como iluminación LED, señalización por audio, sistemas en 'braille', notificación automática de incidencias y atención las 24 horas del día durante toda la semana en caso de emergencia. Tendrán capacidad para trece personas (hasta 1.000 kg).

El concejal de Barrios, Obras, Servicios y Mantenimiento, Kepa Urteaga, se ha referido “al gran uso" de ambos ascensores y a los "numerosos actos vandálicos" de los que han sido objeto. "Como consecuencia, se encuentran en mal estado y con muchas averías. Con esta medida, garantizamos la accesibilidad y la calidad de vida de los vecinos de los barrios altos”, explica.