“Arrasate está atrapada en la inacción de EH Bildu y Elkarrekin”. De este modo inició el portavoz del PNV, Ander Garay, el balance que, en su opinión, arrojan los dos primeros años de legislatura. Para la formación jeltzale, el Gobierno municipal “se ha quedado anclado en buenas palabras y fotos iniciales, sin liderar ni dar pasos concretos para sacar adelante las infraestructuras imprescindibles que las y los arrasatearras demandan”.

Alcanzado el ecuador del mandato, este pasado miércoles el PNV hizo una valoración, que antes de entrar en detalles, el propio Garay ya adelantó que iba a ser “crítica”. “Hay una falta de avance real en los proyectos estratégicos que el municipio necesita para su desarrollo”, insistió.

Puntos de desacuerdo

Se refirió, de esta manera, al polideportivo Iturripe que, según apuntó, “está estancado en un anteproyecto”; la reforma del Amaia Antzokia que “aún no cuenta con un proyecto iniciado tras dos años del derrumbe del techo”; la reurbanización del Grupo San Juan que “sigue en fase de ideas sin concreción”, y la de Gudarien Plaza en San Andrés, que “carece de resultados tras el proceso participativo que se llevó a cabo”; la ordenanza de terrazas continúa “sin ser redactada de forma definitiva”; el proyecto del barrio de Udala que “todavía no se ha presentado, pese a estar previsto para 2024”, y la oficina del BAZ “ha sufrido recortes de horario sin que se haya dado comienzo a las obras prometidas”. Garay citó, asimismo, el palacio de Monterrón, que “lleva dos años cerrado sin abrirse un proceso participativo”, y el 'cohousing' de La Merced que “está paralizado, ya que ni siquiera ha sido adquirido el edificio por parte del Ayuntamiento”. 

Incapacidad para la gestión

El PNV sostiene que la coalición EH Bildu-Elkarrekin Arrasate ha demostrado “una incapacidad” para la gestión, sumada a la “eliminación de los presupuestos participativos y la ausencia de transparencia en decisiones como el Plan de Movilidad Sostenible”. “Han paralizado proyectos clave y dejado a la ciudadanía fuera”, cuestionó el portavoz jeltzale.

"Totalmente reactivo"

Consideró, a su vez, que el equipo de Gobierno es “totalmente reactivo, incapaz de anticiparse a problemas”, y puso como ejemplo “lo sucedido con los ascensores de Gorostiza, que no entraban en sus planes hasta que los vecinos se movilizaron”. También se mostró crítico con el “desconocimiento” que, a su juicio, tiene el Gobierno arrasatearra “de los tiempos de la administración, porque dan fechas que no se cumplen”. “Las obras del Amaia antzokia no empezarán este año, y las de Iturripe se aplazan al menos hasta 2026, cuando el plazo indicado por la alcaldesa decía que en 2025 estarían en marcha”, recalcó Garay.

"Falta de autocrítica"

La formación jeltzale denunció, por otro lado, “la falta de autocrítica” de EH Bildu-Elkarrekin, a quienes responsabilizó “por la lentitud” en la implantación de medidas como los radares de control de velocidad. “En dos años no han activado ni un solo dispositivo con el riesgo que ello supone para la seguridad vial y, sin embargo, se han dedicado a echarnos la culpa públicamente a la oposición”, se quejó Garay.

Por tanto, el PNV exige un “cambio urgente de rumbo, con gestión eficaz y compromiso real para que los proyectos se concreten y la participación ciudadana se recupere". “Arrasate merece un Gobierno que actúe con responsabilidad, sea capaz de liderar los proyectos necesarios para la ciudadanía y, sobre todo, ya que escasean, ofrezca resultado”, concluyó Garay.