El escultor elgoibartarra Arturo Andrade presentó el pasado 26 de octubre su último trabajo, una imponente escultura en piedra que rinde homenaje al médico rural en la localidad orensana de Laza. La plaza que alberga la figura, una obra hecha en mármol de Markina de casi dos toneladas, sirvió de marco a un acto de reconocimiento a todos esos médicos que se han desvivido por atender a los vecinos de los pequeños pueblos, aldeas y casas diseminadas por los valles y montañas de Galicia, en muchas ocasiones con más vocación que medios.

Inauguración solemne

Esa dedicación se plasmó en un encuentro que tuvo como eje la reivindicación de la medicina de proximidad y contó con la participación de los máximos representantes del concello de Laza, la Asociación de Médicos Gallegos (Asomega) y la delegación en Galicia de Médicos Generales y de Familia (SEMG), impulsores de este proyecto, así como con la del presidente del Parlamento de Galicia, Miguel Ángel Santalices. “Hubo discursos en los que se destacó el papel de los médicos rurales y no faltaron ni los gaiteros. La presentación de la figura me desbordó. No esperaba que la inauguración fuera a tener tanta relevancia”, manifestó Andrade en su retiro de Allariz, la víspera de volver a su casa en Elgoibar.

Mármol negro de Markina

El escultor elgoibartarra recibió el encargo de hacer la figura el pasado mes de julio. A partir de ahí, tocaba decidir qué tipo de piedra usar y cómo representar la figura que tenía como meta reivindicar el trabajo del médico rural. La primera cuestión se resolvió rápido. Andrade conserva varios bloques de mármol negro de Markina en el jardín de su casa, ubicada en una aldea próxima a Allariz de la que es originaria su familia, y fue uno de ellos el que llamó la atención de quienes le encargaron el proyecto. “Eligieron un pedrusco de más de dos toneladas. Pensé que podía ser demasiado grande, pero cuando vi la plaza en la que se iba a colocar la figura comprendí que su tamaño era el adecuado. Es una plaza muy amplia y abierta, y pide una escultura con porte”.

Mujer de la tribu celta Ártabros, obra de Andrade que se encuentra junto a la Torre de Hércules en A Coruña. A.A.

Granito gallego y mármol vasco

La piedra formaba parte de un grupo de bloques de mármol de Markina que llegaron hasta Allariz hace casi treinta años, fruto de un acuerdo entre Andrade y el escultor de Markina Mikel Lertxundi.

“Una Casa de Galicia radicada en el País Vasco le encargó a Lertxundi una escultura dedicada a Castelao, pero le pusieron como condición que debía estar hecha con piedra gallega. A mí me gusta mucho trabajar con el mármol de Markina, y acordamos que íbamos a contratar un camión a medida, para que trajera varias toneladas de la piedra de Markina a Allariz y, a su vez, llevara granito gallego al País Vasco, y así fue como la piedra llegó aquí”.

Gabardina y sombrero

Después de tres décadas asentada en el mismo lugar en el que fue depositada, tocó poner fin a su reposo y darle el uso que la llevó hasta Allariz. Andrade se plantó delante de la piedra y empezó a barajar la forma de materializar el encargo. “Me decidí por representar la figura de un médico ataviado con una gabardina, que se encamina hacia la casa de un paciente sujetándose el sombrero para que no se lo lleve el viento. Es una imagen que yo vinculo con la del médico rural, y no debo ser el único. Muchos de los que asistieron a la presentación eran médicos y me comentaron que la elección de la figura les había parecido muy acertada”, indicó el escultor elgoibartarra.

Arturo Andrade sobre el buey de bronce que conmemora la Festa de Boi de Allariz A.A.

Un estilo muy personal

Los que pasen por Laza a partir de ahora se encontrarán con una imagen reconocible para todos aquellos que tienen noticia de la obra de Andrade. Las formas y la apariencia del rostro tienen mucho en común con otros trabajos suyos que se pueden ver en las calles de distintas localidades. “Se puede decir que es de la familia”, afirmó con humor el autor de la escultura dedicada al médico rural

A 50 kilómetros de Laza se encuentra Allariz, y en esa localidad orensana se puede admirar desde hace años la imponente escultura de un buey hecho en bronce. La figura, que pesa 800 kilos, fue hecha a tamaño natural por Andrade en su pequeño taller de fundición de Elgoibar en conmemoración de la Festa do Boi que se celebra en Allariz el mes de junio. A su vez, la Torre de Hércules de A Coruña y, más en concreto, el parque de esculturas que hay a su lado, guardan también figuras del elgoibartarra. “Son tres esculturas hechas en granito gallego: un marinero, un guerrero y una mujer, que representan a los tres pilares de la sociedad que formaban los ártabros, una tribu celta que vivía en el noroeste de lo que hoy es Galicia”.

Arturo Andrade, reponiendo la imagen de San José que algún desaprensivo se llevó del belén de bronce del monte Morkaiko. A.A.

Elgoibar también es testigo del trabajo de Andrade. Kalebarren acoge, justo al lado de la Casa de Cultura, un guerrero y una mujer, hechos en mármol de Markina. Y quien quiera disfrutar de la montaña y ver otra obra suya no tiene más que calzarse las botas y subir hasta la cumbre del Morkaiko, donde encontrará un pequeño belén en bronce hecho por el escultor elgoibartarra.