El grupo Amalatz de Errenteria en 1981 cogió el testigo de Oreretako Emakumeen Taldea. Con un punto de vista más moderno y diverso, Amalatz siempre ha trabajado a través de diversas acciones y actividades por la liberación de la mujer y por la igualdad y paridad entre géneros.
Una de esas actividades son las proyecciones de películas que organizan cada tercer mes del año, en torno al 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Estas sesiones de cine nacieron en 2004 con el objetivo de tratar diferentes y diversos temas de la actualidad relacionados con la mujer. Fani Herrador, Nati Rufo y Julia Irasuegi son tres de las mujeres que año tras año se encargan de seleccionar las películas con temas que necesitan conocerse más en profundidad y crear conciencia sobre ellos.
“Nos dimos cuenta de que a las charlas no venía mucha gente y entonces pensamos en un formato más atractivo para tratar todos esos temas que nos interesaban, como nuestros problemas, nuestras opresiones...”, recuerda Rufo. “Primero proyectamos una película y después invitamos a colectivos o a grupos de expertos en el tema para abrir un debate”, añade Irasuegi. “El cine nos dio la posibilidad de abrirnos a un mogollón de mujeres de los grupos de barrios porque era más atractivo”, relata Rufo.
“Al principio empezaron a venir 60 u 80 mujeres. A los años ya empezaron a venir más de cien y en la edición del pasado año, en las tres sesiones, vinieron 208, 205 y 198 mujeres. En el umbral de las 200 mujeres en cada sesión. El cine está lleno y en los 20 años hemos triplicado el número de espectadoras”, apunta Herrador. “Algún hombre también viene, pero la gran mayoría son mujeres”, apostilla Irasuegi.
“Al principio cobrábamos dos euros la entrada, pero en los últimos años hemos recibido una subvención y como nos llega para pagar la organización la entrada ahora es gratuita”, señala Herrador.
En Niessen
Las proyecciones se llevan a cabo en el auditorio de Niessen Kulturgunea. Cada año tratan de proyectar cuatro películas, una cada jueves de marzo. En función del calendario y de la disponibilidad de la sala, en algunos años han organizado tres sesiones. Este año, debido a la proximidad de la Semana Santa, que cae a finales de este mes, solo se han organizado dos sesiones. Eso sí, las dos películas elegidas han dado mucho de qué hablar y han sido taquilleras. El pasado 14 de marzo proyectaron Las buenas compañías y el próximo 21 de marzo ofrecerán la galardonada película 20.000 especies de abejas.
Para el debate de esta última cinta, que trata el tema de la transexualidad, acudirán dos miembros del colectivo Naizen con el fin de poder acercar al público a esa realidad y ayudarle a comprenderla.
Tras la película de Las buenas compañías, que habla de la red clandestina de Errenteria para ayudar a las mujeres a abortar, “quisimos regalar vida”. Así, con motivo también del 20º aniversario cada persona que asistió a la proyección se llevó una planta cuya maceta está adornada con el logo de Amalatz.
20 aniversario
“Nosotras cuando queremos tratar un tema pensamos en las películas en las que se refleja ese tema. Tratamos de traer películas nuevas, pero que no sean primicia. Por ejemplo, las dos películas de este año se han visto bastante en el cine”, indican. “En lo que sí incidimos es en tratar de proyectar cintas cuyas directoras sean mujeres, eso no quiere decir que si una película rodada por un hombre trata un tema que nos interesa no la pongamos”, aclaran.
En estos 20 años son muchos y diversos los temas que han tratado: la guerra, el aborto, los cuidados, las miserias familiares, el lesbianismo, el divorcio, la soledad no deseada, la prostitución, la situación de las mujeres en otros países, la ablación, los abusos, la importancia de la amistad, las redes de mujeres... “Nosotras tenemos muy claro que nuestro público son las mujeres de los barrios y a ellas van dirigidas”.
En dos décadas apenas ha variado el formato, aunque en algunos años introdujeron novedades como los sketch o los microteatros que servían como presentación de la película que se iba a ver. También en algunas ocasiones han proyectado cortometrajes.
De cara al futuro no planean cambiar el formato, aunque tienen en mente que una de las proyecciones se traslade a Emakumeen Etxea. “Queremos acercar a todas las mujeres a que conozcan Emakumeen Etxea, un servicio que funciona muy bien y que lleva a cabo actividades durante todo el año para empoderar a las mujeres”, señalan.
