El martes por la mañana las asociaciones de vecinos de los barrios de Pontika, Galtzaraborda, Igantzi, Beraun y Kaputxinos mantuvieron una reunión con la diputada foral de Movilidad, Azahara Domínguez, para tratar los cambios que se proponen en el proyecto modificado de concesión del servicio público de transporte interurbano regular de viajeros de uso general por carretera de las comarcas de Bidasoa Behea, Oarsoaldea y sus conexiones con Donostia.
En concreto, a los vecinos de los barrios altos de Errenteria el punto que más les preocupa es la desaparición de la línea de autobús E15. De hecho, el nuevo recorrido propuesto no parará en las zonas altas de dichos barrios.
Sin embargo, según relataron los vecinos, la diputada reconoció un error en la tramitación de las nuevas líneas al no haberse reunido con las partes afectadas por la modificación y dio por escrito a los vecinos un compromiso de que no se iba a suprimir la E15.
Este tema también iba a ser tratado en sendas mociones, una presentada por el PP y la otra por las asociaciones de vecinos y la plataforma de pensionistas Duintasuna, en el pleno del martes por la tarde, pero ante la buena disposición del ente foral decidieron retirarlas.
En el pleno, en nombre de los vecinos y Duintasuna habló Javier Sanz quien aseguró que el compromiso de la diputada fue una victoria de la movilización social. “Hasta que no organizamos las movilizaciones no nos llamaron a una reunión”, sentenció. “Vamos a darles un voto de confianza y la cadena humana que íbamos a llevar a cabo el sábado como señal de protesta queda desconvocada”, indicó.
