Conocer los límites de las fincas y terrenos ha sido fuente de muchas controversias en el ámbito rural. Elementos como un árbol, una piedra de forma singular, un hito, un mojón o un accidente geográfico han servido para determinar dónde terminaba una propiedad y comenzaba otra. Es cierto que, pese a ello, no han faltado las discrepancias pero, de un modo u otro, ese sistema de demarcación de los terrenos ha hecho su función desde tiempos inmemoriales.

Sin embargo, el cambio generacional que está viviendo el campo en las últimas décadas, con una apuesta por una forma de vida más urbana por parte de los jóvenes y una población rural cada vez más envejecida, está dando lugar a que muchas de esas referencias se vayan perdiendo y cayendo en el olvido en la medida en la que los mayores desaparecen. Este hecho, unido a que en ocasiones la información existente en el catastro, la que guardan los ayuntamientos y la que tienen los dueños no coincide, no facilita la atención y gestión de esos terrenos tanto por los propios propietarios como por parte de las instituciones encargadas de la gestión rural.

Acordar los límites

Con el fin de dar respuesta a esta situación, la Diputación Foral de Gipuzkoa puso en marcha en 2022 un programa de digitalización de terrenos rurales por coordenadas GPS que vivirá un nuevo capítulo en Azpeitia el 8 de noviembre. De hecho, el Ayuntamiento de Azpeitia ha programado una serie de encuentros con los propietarios de los terrenos rurales situados en los polígonos 02, 03, 04 y 06 para determinar los límites de las propiedades de cara a su futura digitalización. La participación en el programa, que cuenta con el apoyo económico del Departamento de Economía, Turismo y Desarrollo Rural de la Diputación Foral de Gipuzkoa, no supondrá ningún coste a los propietarios. ”La participación de los dueños de los terrenos es fundamental para el éxito del programa, ya que es a ellos a quienes corresponde acordar los límites de las propiedades. Si los propietarios o sus herederos los han olvidado o no los conocen, establecer los límites será complicado e, incluso, podrían llegar a desaparecer. Esta circunstancia provocaría que cuidar los montes fuera más complicado, con las consecuencias perjudiciales que ello conllevaría para el entorno rural”, terminaron diciendo desde el Ayuntamiento de Azpeitia.