Las obras de renovación de la cuesta de Intzarbakutza ya están en marcha. Se trata de un proyecto que cuenta con un presupuesto de ejecución de 189.195,56 euros (más IVA) y va a ser llevado a cabo por la empresa Egurki Eraikuntzak. Su materialización conllevará cambios en la circulación de vehículos en el barrio de Azpilgoeta. De hecho, la calle Azpilgoeta que le da nombre pasará a ser una vía de sentido único en el tramo que va desde la rotonda de la N-634 hasta el cruce con la calle Arno Bide. Una vez que las obras estén finalizadas, el acceso al barrio se hará desde la rotonda de la N-634 y la reincorporación a la carretera nacional tendrá lugar en la zona de Santuaran, tras superar la plaza que alberga a la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora y al edificio de Chocolates Mendaro.
El anuncio de las obras no ha estado exento de controversia. La razón de ello han sido las afecciones al tráfico que iba a conllevar el cierre del acceso de vehículos a la calle Azpilgoeta desde la rotonda durante las seis semanas que se prevé que duren las obras. La alternativa que se ofrecía a los conductores que venían desde Elgoibar e, incluso, desde los barrios de Garagarza y San José era ir hasta Sasiola y utilizar el cambio de sentido que permite acceder al Kalbario para dar la vuelta e iniciar en ese punto el retorno hacia Mendaro, completando de este modo un recorrido extra de siete kilómetros.
El recién constituido Ayuntamiento de Mendaro ha reconsiderado esta situación y ya no será necesario desplazarse a Sasiola. El acceso de vehículos a la calle Azpilgoeta desde la rotonda de la N-634 se va a cerrar hoy pero, en lugar de tener que ir a Sasiola, los conductores podrán acceder a Azpilgoeta desde el cruce situado junto en la parada de autobuses de Santuaran. La línea continua que prohibe cruzar el carril se va a repintar como línea discontinua para permitir la maniobra de forma provisional mientras duren las obras.
La renovación de la calle Azpilgoeta posibilitará, además de establecer un carril de circulación de sentido único, ejecutar una acera en la margen derecha para su utilización por los viandantes con el fin de mejorar la accesibilidad y la seguridad en ese punto. Esa seguridad vendrá determinada en buena medida por su anchura, ya que en ningún punto de su recorrido será inferior a dos metros. También se renovará la canalización de aguas y la iluminación, que pasará a ser de tecnología LED y, por lo tanto, más sostenible. Además, una barandilla sustituirá al muro de piedra sobre la N-634.
