La Diputación Foral de Gipuzkoa instalará un nuevo lineal de pantallas acústicas en la N-I, a su paso por la localidad, en sentido Gasteiz, entre la salida del túnel de Beasain y el ramal de salida del enlace de Lazkao. Asimismo, se sustituirán las biondas metálicas de este tramo por barreras de hormigón, para mejorar la seguridad de la zona. La nueva estructura cubrirá una longitud total de 330 metros con pantallas fonoabsorbentes de una altura de 3,50 metros.

La diputada de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide, y la alcaldesa de Beasain, Leire Artola, presentaron los trabajos que comenzarán a ejecutarse en verano, el martes en una comparecencia de prensa celebrada en la Casa Consistorial. Se trata de una actuación que tiene como objetivo mitigar los problemas de ruido provocados por la N-I y el tren, y que se enmarca dentro del Plan de Acción frente al Ruido de las Carreteras del ente foral.

En palabras de Oiarbide, “este tipo de actuaciones son prioritarias para el departamento porque tienen una incidencia directa en la vida de miles de guipuzcoanos y guipuzcoanas. Como es el caso de Beasain, donde las pantallas acústicas protegerán todo un entorno especialmente sensible y su instalación beneficiará a cerca de 4.000 beasaindarras”. La diputada destacó que la zona de actuación en el caso de la villa goierritarra es de especial afección debido a que al ruido generado por el tráfico rodado, se le suma el provocado por el paso de los trenes.

Condiciones especiales

Dadas las características del entorno, las obras deberán hacer frente a una serie de condiciones especiales. “Por una parte, la N-I, a su paso por Beasain, es una de las principales vías de comunicación y transporte del territorio. Las obras evitarán, en la medida de lo posible, cortar el carril en la calzada sentido Gasteiz durante los días laborables en horario diurno”, declaró Oiarbide. “Por otra parte, existen limitaciones en el entorno de las vías de ferrocarril de ADIF”, añadió.

Los trabajos han salido a licitación por 1.160.380 euros.