Comienzan a adaptar la zona de la Portería para su remodelación
El proyecto busca adecuar el espacio por la inundabilidad que genera el río Oria a su paso
En breve darán comienzo las labores de demolición en la zona de la Portería de Beasain, en el marco del proyecto que busca solucionar el problema de inundabilidad que genera el río Oria a su paso por el lugar. Por ello, han empezado a colocarse las casetas e infraestructuras de operarios en el aparcamiento ubicado junto al edificio Olaran. Asimismo, se ha dado inicio a la adecuación del lugar para los trabajos de descarga y almacenamiento de la maquinaria pesada. Se estima que estos preparativos se prolonguen durante dos semanas.
También, se han comenzado a colocar las vallas en el entorno para que los trabajos de demolición se realicen de la manera más segura posible. Concretamente, las vallas acordonarán el itinerario que bordea el río Oria, desde el cruce de la calle Juan XXIII con la Avenida Ezkiaga, hasta el número 15 de la calle José Migel Iturriotz.
Durante la adecuación de la zona, el bidegorri y la acera del lado del río permanecerán cerrados, “con el objetivo de que las obras se realicen bajo las condiciones de seguridad necesarias”, han explicado desde el Ayuntamiento beasaindarra. De esta manera, las personas que deseen transitar desde José Miguel Iturriotz 15 a Ezkiaga, y viceversa, tanto peatones como usuarios de bicicletas, deberán utilizar la acera del lado donde está situado el edificio Olaran. No obstante, quienes utilicen la bicicleta deberán llevarla en la mano, y es que no estará habilitado el bidegorri.
Circulación de vehículos
Por otro lado, el tráfico de vehículos mantendrá la normalidad durante la ejecución de las obras. Se utilizarán los semáforos situados en ambos extremos para regular el paso de los automóviles por el único carril que existe en el lugar. Sin embargo, habrá excepciones. Por ejemplo, cuando se deba mover la maquinaria pesada o cuando las obras de derribo requieran de una interrupción. En estas situaciones podrá haber pequeños cortes de tráfico puntuales, con la supervisión y gestión, siempre, de la policía municipal de la localidad goierritarra.