Beasain volvió a sentir emoción el 5 de febrero. El municipio goierritarra pudo volver a conmemorar la festividad de San Martín de Loinaz, una jornada dedicada al patrón local. Tras dos años, regresaron a la villa vagonera las actividades tradicionales de la fecha, sin las restricciones y prohibiciones características de la pandemia.

Unanua, Aizpuru y Gorrotxategi, en el centro.

La Cofradía de la Morcilla celebró el XXXVI Capítulo General, con récord de asistencia. Más de una veintena de cofradías acudieron a la cita. Concretamente fueron 25 las cofradías que acudieron a Beasain. Algunas de ellas vascas y otras de diferentes puntos de la península. Ricardo Miguel Álvarez, de la Cofradía Amigos de los Nabos de Asturias, destacaba lo bonito de este día, que sirve para “compartir con los amigos la amistad”, además de “para defender los productos representados”.

Asimismo, este acto incluye la entronización de los cofrades de honor. Los beasaindarras Eli Gorrotxategi, responsable de la quesería La Leze, y Juantxo Unanua, excronista local de El Diario Vasco durante tres décadas, así como el gabiriarra Andoni Aizpuru, periodista y presentador de EITB, juraron con ilusión y alegría “rendirles respeto y consideración en la mesa a las morcillas, estén cocidas, asadas o fritas, vengan solas o en amigable compañía”, además de prometer “honrarlas”, reconocer que “en estas tierras de Goierri se concentra la esencia de la más ancestral chacinería vasca” y proclamar a Beasain “como la capital de la morcilla de Euskadi”.

Un día completo

La jornada continuó con una comida de confraternización. No obstante, horas antes tuvo lugar la ofrenda floral al santo beasaindarra. Tras ello, las cofradías asistieron a la Misa Mayor celebrada en la parroquia de la Asunción.