Finalmente han decidido dar un paso al frente y expresar públicamente su postura ante la controversia creada por la ubicación de las txoznas en Carnaval de Tolosa. La opinión de las y los vecinos de la plaza Euskal Herria y su entorno es clara: “Exigimos que se cumpla el acuerdo de rotación que se pactó con el Ayuntamiento, ¿tan difícil es de entender?”, se preguntan en el comunicado que han hecho público.

Se suman el texto las y los vecinos de la plaza donde se ha colocado estos últimos años la carpa de las txoznas, pero también su entorno, es decir, residentes en la calle Andia, Inpernu, Pintor Lekuona, Beotibar y Soldadu. Se muestran comprensivos con la actividad y el ruido que generan los carnavales: “Nos gustan y queremos disfrutar de ellos. Y nos gustaría que nada ni nadie los estropeara, ni se enrareciera el ambiente. Entendemos que el ruido se acentúe, que la hostelería cierre más tarde, que al poco de su cierre comiencen las labores de limpieza..., gran labor, por cierto. Pero que a todo esto, año tras año, se sumen las txoznas... Los carnaval es nos duran seis días y seis noches. Y no es sólo el nivel de ruido, la estructura de las casas de la plaza es de madera y nuestras viviendas vibran”, argumentan.

Aseguran que llevan “más de quince años” solicitando que se aplique el sistema de rotación y que no les importa quiénes componen las txoznas: “Nuestro interlocutor válido siempre ha sido el Ayuntamiento. Y cuando hablamos de rotación no nos referimos solamente a dos espacios: nos gustaría que se contemplaran varios más. La ubicación rotatoria se acordó en su momento y pedimos que se cumpla este acuerdo. Es más, exigimos, que se cumpla”.

Son conscientes del lugar en el que viven. En dicha plaza se realizan gran serie de actividades: ferias, conciertos, teatro, deportes... y actualmente en la zona hay alrededor de diez establecimientos hosteleros. “Casi todos ellos con terraza. No tenemos nada en contra de todo esto, pero creemos que es fácil entender lo que esto acarrea. Todos los fines de semana del año (siendo optimistas, “solo” los fines de semana) el nivel de ruido, mañana, tarde y noche hasta bien entrada la madrugada es muy alto. Por no hablar de otros problemas como la suciedad, que ha llegado hasta tal punto que, a petición de la vecindad, el Ayuntamiento ha tenido que poner váteres los fines de semana en Andia y Pintor Lekuona Kalea”, contextualizan.

Explican, además, que con el fin de compatibilizar usos, acercar posturas y buscar soluciones apropiadas a lo que conlleva el ocio, los vecinos y vecinas de la plaza y su entorno han realizado una serie de aportaciones y alegaciones para la zona que les concierne, y a las ordenanzas que ha elaborado recientemente el Ayuntamiento: la ordenanza de hostelería, la de terrazas y la de ruidos y vibraciones. De esta forma, entre otros, se ha elaborado un mapa de ruidos del ocio para saber cómo de expuesta se encuentra la vecindad y así se pueda diseñar un plan estratégico para reducir la contaminación acústica y evaluar la vibración que sufren sus viviendas.