Kaixo, Hola, Hello, Ciao, Salam aleikum, Namaste, Hallo, Marhaba, Olá…; diferentes idiomas laten en las calles de Oñati, y el euskera quiere seguir siendo el punto de encuentro de todos ellos; la lengua vehicular que facilite la integración de las personas de diversas procedencias que han emprendido una nueva vida en el municipio. “Os animo a que participéis; Auzoko nos permite visualizar la realidad y trabajar por la inclusión de las distintas culturas. Tenemos que abrir los ojos y aprender con todos y entre todos; este programa nos brinda esta oportunidad”, manifestaba la concejala Alaitz Kortabarria en la presentación del nuevo curso de Auzoko.
Después de que la pandemia trastocara el programa, la vuelta a la normalidad propone una cita semanal en el edificio de Eltzia, donde el proyecto que fomenta la diversidad y la convivencia intercultural a través del euskera tiene su propio espacio desde el año pasado. “Nos reuniremos los miércoles en dos grupos, de 15.00 a 16.30 horas, y de 19.00 a 20.30”, explicó la dinamizadora de las sesiones, Miren Zubia. Precisó, no obstante, que los participantes superan el medio centenar y que “no habría problema” de crear un tercer grupo.
Auzokide (personas migrantes) y auzotar (oñatiarras que viven en euskera) son la clave de este “enriquecedor” programa, que invita a compartir experiencias. Dinámicas grupales se refuerzan con actividades lúdicas y sinergias creadas con otros colectivos locales.
