Angeles Azkue Alonso, Alberta Etxaniz Arrieta, Karmele Gabilondo, Irene Okamika Lizundia, Jesusa Arrien Bilbao, las hermanas Miren y Juanita Landaluce, Concepción Uribetxeberria, Pura Salaberria, Catalina Urtaza Salaberria, María Koro Arrizabalaga, Josefa Inazia Manzisidor Aristi, Cándida Arregi, Felisa Unzueta Arriola, Antonio Irigoyen, José Antonio Goikoetxea Unzueta, Eugenia Zubiaurre…

Son solo algunas de las más de 100 mujeres, niños y niñas de Elgoibar que en febrero del año 1937, en plena guerra civil, se vieron obligadas a abandonar su localidad. Las tropas fascistas les expulsaron del pueblo por no delatar a sus maridos y padres; gudaris o milicianos que habían marchado al frente para defender el legítimo orden de la II República.

“Después de hacerse con el control del municipio, los franquistas empezaron a llamar al Ayuntamiento a las mujeres de los gudaris y milicianos para preguntarles dónde estaban sus maridos. La respuesta que dieron fue que no lo sabían, que se habían ido de casa pero que desconocían su paradero; y los franquistas las expulsaron diciendo que se fueran tras sus maridos”, explica Hodei Otegi desde el colectivo para la recuperación de la memoria histórica Elgoibar 1936.

A aquellas mujeres (y a sus hijas e hijos) no les quedó otra opción que marcharse de su pueblo, “prácticamente con lo puesto y en la mayoría de los casos caminando por las vías del tren hacia Maltzaga”; pero su pueblo no se ha olvidado de ellas.

El columbario de la dignidad situado en el cementerio de Olaso acogerá este sábado (a las 12.00 horas) un acto organizado por Elgoibar 1936 en recuerdo de aquellas mujeres y niños.

Será el cuarto homenaje promovido por el colectivo ciudadano con el objetivo de reconocer y recuperar la memoria de las personas de la localidad que padecieron la represión fascista. En septiembre de 2017 Elgoibar 1936 brindó un homenaje general a todas las víctimas, en 2018 el reconocimiento fue para los elgoibartarras muertos durante la guerra y en 2019 para los que sufrieron la cárcel o estuvieron internados en los campos de concentración franquistas.