o fue una ceremonia como las que se hacen para entregar los Óscar o los Goya ni un glamuroso festival de cine plagado de rutilantes estrellas del celuloide como los de Donostia, Venecia o Cannes, pero el aspecto que ofreció durante toda la jornada de ayer el entramado urbano de Azpeitia fue el propio de las grandes citas.

No hubo alfombra roja pero no hizo falta para que las y los azpeitiarras salieran a la calle con sus mejores galas. Y es que, tras un año de obligado paréntesis, ayer la localidad volvió a celebrar su Elegante eguna, sin lugar a dudas el día más especial de las fiestas del Carnaval en la villa del Urola.

La espera se había hecho larga y en las calles de Azpeitia se pudo constatar que la gente tenía ganas de Elegante eguna. Como antes de la pandemia, la jornada resultó multitudinaria, con el buen ambiente reinante como principal protagonista.

A ello contribuyó, claro está, el intenso programa de actividades diseñado para la ocasión, que incluyó sendas dianas de los txistularis y la Banda de Música, dos sokamuturras, pasacalles de diferentes grupos, un espectáculo de música y danza para el público juvenil, una actuación del DJ Josu Rodriguez y, como no, el insustituible desfile de artzai-iñudeak junto a tambores y la ciudadanía elegante.

Sin tiempo para descansar, el Carnaval azpeitiarra continuará hoy con otra jornada plagada de actos. Entre otros, habrá sokamuturra infantil (11.00 horas), desfile de disfraces de los más pequeños (12.30 horas), sokamuturra para adultos (16.15 horas), concurso de disfraces (20.00 horas) o una actuación del DJ Oihan Vega (23.30 horas).

Aun así, el Carnaval de Azpeitia no terminará ahí. Todavía queda la intensa jornada de mañana.