- La reforma del paseo de La Concha dio ayer un nuevo paso adelante con el inicio de las obras de ensanchamiento de la acera y de la sustitución de la barandilla, en un tramo de 152 metros, que empieza en el punto cercano al mirador de Fleming donde hay unas escaleras que bajan a la playa y sigue hacia La Perla.

El mal tiempo no impidió el inicio de las primeras actuaciones de la obra, que obligará a que peatones y ciclistas compartan un mismo espacio en la actual calzada, por lo que los usuarios de bicicletas tendrán que ir con el vehículo en la mano.

El corte del espacio peatonal del paseo no se produjo ayer de modo integral, por lo que los ciclistas pudieron transitar por el bidegorri provisional existente. Los primeros trabajos se llevaron a cabo en la zona más cercana al túnel de El Antiguo, donde fue necesario mover el semáforo que da paso alternativo a los vehículos autorizados en dirección al Centro y colocar las vallas para delimitar el camino para peatones y ciclistas. "Si no hay problemas y el tiempo y las mareas no lo impiden, iremos de modo paulatino ocupando cada día parte del espacio que va a estar en obras para alcanzar la totalidad del tramo al final de la semana", explicó la concejala de Proyectos Urbanos, Duñike Agirrezabalaga.

Está programado que las obras se alarguen hasta el verano. Una vez terminadas, no solo se habrá ensanchado el paseo hasta seis metros sino que se habrán cambiado 38 fragmentos de barandilla, con sus correspondientes machones de piedra, y se habrá reforzado el muro de costa sobre el que se asienta.

Una fundición con sede en Oporto ha sido la encargada de ejecutar los nuevos tramos de barandilla, copiados de la original, al igual que los instalados ya entre el túnel de Ondarreta y las escaleras cercanas al monumento a Fleming.

La misma empresa también ha sido la encargada de fabricar la nueva farola de la rampa de Ondarreta cercana al Tenis, que desapareció en 2014 con un temporal y aún no se ha repuesto.

La actuación que comenzó ayer tiene un coste previsto de cerca de 800.000 euros y se abonará con cargo al presupuesto del pasado año 2021.

Sin embargo, quedarán aún otros dos tramos de sustitución de la barandilla para que toda la verja ideada por Rafael Alday en 1910, uno de los símbolos estéticos de Donostia, quede íntegramente renovada.

En concreto, la segunda fase prevista para sustituir la barandilla del paseo de La Concha se ejecutará en tres fases, una de las cuales es la que comenzó ayer. Quedarán pues otras dos.

Precisamente, la Junta de Gobierno prevista para hoy en el Ayuntamiento de Donostia dará luz verde al proyecto de la empresa Girder para llevar a cabo el siguiente tramo, de unos 120 metros, para cambiar la barandilla y reforzar el muro de costa correspondiente al nuevo tramo. Este tramo, en principio, se llevará a cabo con cargo al presupuesto de 2022.

Aún quedará pendiente una última parte de cambio de barandilla y obras complementarias para llegar hasta La Perla, de 150 metros de longitud.

La ocupación de la zona de calzada que acogerá a peatones y ciclistas se llevará a cabo de modo paulatino a lo largo de la semana