A lo largo del pasado año, el Ayuntamiento de Donostia acogió la celebración de 130 matrimonios, un 86% menos que el año anterior, cuando se produjeron 226. La situación de inseguridad motivada por el covid, más el periodo de confinamiento en el que se suspendieron muchos enlaces, hizo que las ceremonias se redujeran de modo drástico.

De hecho, en abril no tuvo lugar ninguna, a pesar de que no estaba prohibido casarse. Pero con todos los establecimientos de hostelería clausurados, nadie se animó a firmar un matrimonio para volver a casa directamente. En mayo, mes tradicionalmente muy propicio para estas ceremonias, hubo siete enlaces. En julio, la actividad se reactivó algo y la casa consistorial acogió 22 casamientos mientras que en septiembre, un periodo cada vez más atractivo para contraer matrimonio, fueron 21.

Aunque el pasado año se celebraron 96 bodas menos que en 2019, el departamento de Relaciones Públicas del Ayuntamiento que se ocupa de esta tarea no tuvo menos trabajo, ya que tuvo que modificar numerosas fechas, anular algunas y añadir otras.

Por ejemplo, en el mes de junio, con solo once ceremonias, se produjeron también 45 modificaciones, entre anulaciones y cambios de fecha para más adelante. También tuvieron lugar bodas sin espera, de parejas que preguntaron si había un hueco libre y, algo extraño en época sin pandemia, consiguieron formalizar su matrimonio de modo inmediato.

De los 130 enlaces firmados en el consistorio en 2020, 40 fueron de los denominados exprés, que se celebran en pocos minutos en el salón de recepciones del Ayuntamiento los segundos y terceros jueves de cada mes. El resto de las bodas (90) tuvieron lugar en el salón de Plenos, tanto los segundos y terceros sábados de cada mes como los viernes anteriores a ellos en los meses de junio, julio, agosto y septiembre.

Con la pandemia, el máximo de personas que puede asistir a las bodas exprés es de ocho, incluyendo los dos contrayentes y el concejal que oficia el acto. En el salón de Plenos, la cifra total de asistentes permitida es de 50.

los sábados, ocho. Los jueves, el número de ceremonias que puede acoger el Ayuntamiento es de cuatro y los sábados, de ocho. Todas ellas se celebran por la mañana. Sin embargo, los viernes de junio a septiembre, por su parte, son cuatro, entre las 18.00 y las 20.00 horas.

Más de 200 bodas al año

Antes de la llegada de la pandemia, las bodas en la casa consistorial de Donostia eran cada año cerca de un centenar más que las celebradas en 2020. En los últimos cinco años, los casamientos en el antiguo casino han sobrepasado siempre la cifra de 200 y llegaron a ser 244 en 2015, una cifra que no se ha vuelta a repetir. Tanto en 2019 como en 2017 se registraron 226 bodas, mientras que en 2016 fueron 2011 y el 2018, 211. De las 130 bodas registradas el pasado año, 88 se celebraron en castellano, 13 en euskera y 29 en bilingüe. 2015 fue ejercicio en el que más bodas en euskera se pidieron, con 35, seguido de 2019, con 34.

Cuando los contrayentes desean que les case un determinado concejal o el alcalde, no tienen más que pedirlo y si no tienen ningún impedimento lo suelen hacer. Si no solicitan ninguno, como es más habitual, existe un turno de corporativos del Gobierno municipal (PNV-PSE) que va oficiando los matrimonios.

El Ayuntamiento, el juzgado y las distintas iglesias son los lugares de la ciudad en los que tienen lugar los enlaces matrimoniales. Las bodas civiles han ido aumentado su peso y en la Comunidad Autónoma Vasca son ya nueve de cada diez.