donostia - El Consejo del Gobierno Vasco aprobó ayer el decreto que convierte la Parte Vieja y el muelle de Donostia en Bien Cultural, con la categoría de Conjunto Monumental. La nueva catalogación de la parte más antigua de la capital guipuzcoana llega un año después de que la dirección de Patrimonio del Departamento de Cultura y Política Lingüística del Gobierno Vasco y el Ayuntamiento donostiarra llegasen a un acuerdo para que ambas zonas históricas se convirtieran en Conjunto Monumental, como lo son también los cascos históricos de Bilbao y Vitoria desde hace más de veinte años. En el caso de Donostia, el expediente para su declaración como monumento histórico-artístico se inició hace 32 años.

Una vez finalizado el periodo de alegaciones en los últimos meses, se han introducido algunos cambios, como la posibilidad de instalar ascensores, “siempre que se respete la forma y el tamaño de las parcelas”, según informó el Gobierno Vasco. Además, la declaración de Conjunto Monumental prioriza la peatonalización existente así como el mantenimiento del adoquinado, como el del muelle. El decreto, además, quiere remarcar la puesta en valor de los edificios, las plazas, las murallas, las fuentes, los monumentos así como el arbolado y la jardinería.

La protección aprobada no permitirá la modificación de las alineaciones actuales, “ya que la trama urbana resulta ser uno de los rasgos característicos de un Conjunto Monumental”, y regula todos los aspectos relativos a la rehabilitación, demolición, uso o actividad.

El decreto de protección supone dar un paso más en la actual protección municipal, con condiciones añadidas para los propietarios, aunque en la línea de las ya existentes. La declaración señala que el casco histórico donostiarra “cuenta con valores históricos, arquitectónicos y urbanísticos reflejados en su traza urbana, en la propia homogeneidad del conjunto, que otorga valor a edificios que individualmente pueden resultar algo más discretos, en la calidad arquitectónica de sus notables construcciones, en el armónico diseño de una arquitectura residencial de concepción neoclásica, o en las construcciones anteriores a 1813”.

Límites La protección afecta al espacio delimitado por un perímetro cuadrangular, al que se une el muelle, con los siguientes límites: desde la esquina sur del edificio de la Sociedad Fotográfica hasta el Boulevard, desde la esquina San Juan-Boulevard) hasta el muelle y el entorno más próximo al mar hasta el comienzo del paseo junto a la lonja nueva, la Cofradía, el espigón suroeste y la totalidad del Aquarium. El paseo de los Curas, las escuelas de Urgull, la Casa del Guarda y el Museo San Telmo se añaden al conjunto protegido.

El decreto fija diferentes niveles de protección para edificios y otros elementos: especial, media, básica, morfológica, espacios urbanos y “discordancia”, este último para los inmuebles que incumplen la obligación legal de adaptación de las edificaciones del entorno. Asimismo, según señaló Lakua, la catalogación “busca ofrecer un equilibrio entre la conservación de la morfología de la Parte Vieja y la flexibilidad a la hora de gestionar las necesidades de los 4.000 vecinos” del barrio.

El alcalde, Eneko Goia se mostró satisfecho por la aprobación de la catalogación de Bien Cultural, con la categoría de Conjunto Monumental. “Es una excelente noticia que veníamos buscando desde hace tiempo -dijo- porque esta calificación lo que hace es poner en valor el conjunto monumental de la Parte Vieja y el muelle y además, dotarlo del grado de protección que se merece”. El mandatario recalcó que “ ha sido un proceso complejo” y añadió que “se trató de conseguir esta calificación en 1987, pero no hubo manera de avanzar”. “En esta legislatura afortunadamente hemos conseguido ponernos de acuerdo”, subrayó.

Varios niveles: Protección especial: iglesias de San Vicente y Santa María, San Telmo, Santa Teresa y la biblioteca. Protección Media: conjunto residencial de la plaza de la Constitución, teatro Principal, iglesia de San Pedro del Muelle, plaza de la Trinidad, el Aquarium y el Museo Naval. Protección básica, la mayor parte de los edificios.

Expertos. El decreto de protección ha contado con la colaboración de los arquitectos Luis Sesé y María Escalada.

Tras el incendio. La Parte Vieja tiene su origen en la reconstrucción planeada tras la destrucción casi total por el incendio de 1813. El arquitecto Ignacio Ugartemendia fue el encargado de diseñar la ciudad, según unas reglas edificatorias que son la base del barrio actual. El casco histórico de Donostia tiene la particularidad de ser la primera villa de fundación guipuzcoana y surge de la evolución de la estructura urbana surgida junto al asentamiento situado al pie del monte Urgull.