A lo largo de toda esta semana en los viveros de Ducasse trabajan a tope para ofrecer toda la variedad que se pueda desear en flores y plantas, bien en forma de ramos o centros, al gusto del cliente.
Este próximo fin de semana, coincide con la fecha más destacada para visitar el cementerio y cumplir con una de las tradiciones que hace que se quiera recordar de una forma amable a los seres queridos ya desaparecidos.
En Ducasse, desde siempre, vienen preparando muchos centros de plantas con flor, como el ciclamen o las azaleas que se mezclan con otro tipo de arbustos, un conjunto que puede perdurar prácticamente de un año a otro: las margaritas de bola, que pertenecen a la familia del crisantemo, son también muy solicitadas porque es una flor de temporada. El siempre elegante clavel es también un clásico que está muy bien de precio o los lirium, con excelente aroma, en blanco y rosa, y que al contar con varios capullos quedan muy vistosos. "Los olorosos son más caros pero su flor aguanta más", apunta José Ignacio Inciarte, responsable de Ducasse, cuyo único punto de venta se encuentra en el propio vivero. Este próximo fin de semana y el lunes, 1 de noviembre. Estará abierto en el paseo de Otxoki, 68, en el barrio de Intxaurrondo, cerca del parque de Ametzagaina, en Donostia. Por supuesto también cuentan con variedades artificiales muy logradas.
Los Inciarte ya trabajaban en Ducasse cuando se hicieron cargo de esta empresa hace más de 30 años. Sus servicios también abarcan el asesoramiento a decoradores, proyectos de jardinería exterior, mantenimientos, podas, etcétera. "Para confeccionar un jardín hay que conocer bien los desarrollos de las plantas, su colorido para lograr un buen conjunto, la orientación, si la hoja es caduca o perenne, si son plantas de tierra ácida o no". Las mismas cuestiones hay que tener en cuenta a la hora de plantar en las jardineras del balcón. En este momento y para que luzcan floridos en invierno, se puede plantar ciclamen, pensamientos o antirinums. Todas ellas tienen la ventaja de que no se hielan y, dependiendo del sol que les dé, pueden durar hasta marzo-mayo. Y hablando de colorido, este experto les pondría un poco más a los jardines y rotondas de Donostia, porque arbustos y verde ya abundan en nuestro paisaje.