La comisión de contratación de Euskal Trenbide Sarea, ente público dependiente del departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes del Gobierno Vasco, ha sacado a licitación la construcción de cocheras para unidades de Euskotren en Zumaia.

Los pliegos recogen un presupuesto de 8,2 millones de euros (IVA excluido) para la ejecución de este proyecto y un plazo máximo de 20 meses. El administrador ferroviario vasco y el Ayuntamiento de la localidad costera han firmado un convenio para coordinar el desarrollo de esta obra.

Según han señalado desde ETS, el avance en la construcción de la variante soterrada del Topo y su cada vez más cercana puesta en servicio, tendrán, entre otras consecuencias, la desaparición de la actual estación de Amara, al pasar a ser soterrada, así como el desmantelamiento de su playa de vías.

Para optimizar el servicio y disponer de trenes en las cabeceras de las líneas ferroviarias, el departamento de Transportes del Gobierno Vasco observó la conveniencia de edificar unas cocheras en Zumaia, que completen la disposición de los depósitos de trenes existentes en Araso (Irun).

Nueva playa de vías, residencia y aparcamiento

Las cocheras se ubicarán en la explanada que hay dentro de la plataforma de vía de ancho métrico entre Donostia y Bilbao, a la altura de los depósitos y talleres de autobuses de Euskotren, entre el final de los andenes lado Donostia y la calle Camino Basusta. Las nuevas instalaciones tendrán capacidad para albergar cinco unidades.

Asimismo, el nuevo depósito de trenes conlleva la configuración de una nueva playa de vías que se desarrollará desde la actual plataforma de vía doble, mediante la inserción de nuevos desvíos que permitan la llegada a cada una de las cinco calles de las cocheras desde la vía principal.

También contarán con una nueva "vía mango o de maniobra" situada entre la nueva estructura y el andén sur de la estación de ferrocarril de Zumaia, con una longitud útil de 80 metros.

Las instalaciones incluyen una máquina de lavado externa de 20 metros de longitud, así como un sistema de arenado para la mejora de la adherencia entre ruedas y carriles. Junto a las cocheras, se edificará una residencia y aparcamiento para el personal asociado a la explotación del servicio ferroviario.