El aeropuerto de Hondarribia arranca el verano con un nuevo récord absoluto de pasajeros

El aeródromo de Hondarribia confirma así una tendencia al alza que arrancó con la reanudación paulatina de la actividad tras el confinamiento que provocó la pandemia. Un crecimiento que rompió marcas en mayo, cuando el aeródromo guipuzcoano desplazó a 44.827 pasajeros entre los que llegaron y los que marcharon, y que ha vuelto a quedar pulverizado con 47.612 viajeros según los datos que ha hecho públicos Aena.

No solo fue el mejor mes de mayo desde 2004, batiendo los 41.913 pasajeros de 2007, sino el mejor dato jamás registrado en un mes en el aeródromo guipuzcoano, que había quedado establecido en julio de aquel año, con 43.464.

La media de pasajeros en junio los 19 años entre 2004 y 2022 ascendía a 27.377 personas. Si descontamos de la muestra los dos años anormales por la pandemia (2020, 232 viajeros; 2021, 11.144), una media más fiel a la realidad arroja una cifra que roza los 30.000 pasajeros (en concreto, 29.928).

Seis primeros meses

A la hora de hacer balance de la primera mitad del año, el fuerte crecimiento de primavera y el arranque de verano no permite liderar los datos absolutos de los últimos años, aunque esta primera mitad del año arrojan el tercer mejor dato en este periodo desde 2004, con 216.335 pasajeros; ya cerca de los 229.060 viajeros de 2007 y los 221.341 del año siguiente, a las puertas de la gran recesión económica mundial que en la CAV se dejó notar los años siguientes. Diversas razones mediante, el aeropuerto bajó a 169.000, 119.000 y 128.000 los años siguientes. Fue en 2018 y 2019 cuando el aeródromo comenzó a despegar de nuevo, con 142.000 y 153.000 pasajeros en los seis primeros meses de 2018 y 2019. Hasta que en 2020 llegó una pandemia a todas luces superada con los datos que están dando 2022 y, sobre todo, 2023.

Como se ha observado en los últimos tres años, la tendencia de las operaciones (aterrizajes y despegues) es contraria. La optimización de las aeronaves (de capacidad superior a las de principios de siglo) y unos grados de ocupación elevados están permitiendo batir récords de pasajeros con un número de aterrizajes y despegues inferior al de hace 15 años. Así, si la media de los 17 años desde 2004 (sin 2020 ni 2021) era de 841 operaciones en un mes de junio, esta vez se sitúa en 621 operaciones. Esta cifra se sitúa por encima de las 569 operaciones del mes anterior y las 574 de junio de 2022.

Oferta de récord: nueve destinos

Una clave fundamental de este ascenso está en la capacidad de la infraestructura guipuzcoana de atraer nuevos destinos y nuevas compañías. Lejos del escenario de hace cinco años, cuando solo Iberia y Vueling operaban con regularidad a Madrid y Barcelona, en las últimas temporadas Binter (Las Palmas de Gran Canaria), Volotea (Menorca, Mallorca, Sevilla, Málaga y desde este año, Valencia) y, en verano, British Airways a través de su filial Cityflyer (Londres). Estos nueve destinos suponen el récord de opciones regulares que ofrece el aeródromo guipuzcoano en su historia, superando con la última incorporación de Valencia la marca de ocho del verano de 2022.

Los nueve destinos a los que se puede volar desde Hondarribia se mantendrán hasta la primera quincena de septiembre. Los siguientes en terminar temporada serán varios de Volotea: los últimos a Palma de Mallorca y Menorca están programados para el 7 de octubre, Málaga aguanta hasta el final de la campaña de Navidad (7 de enero), mientras que Sevilla y Valencia están en la parrilla del aeródromo guipuzcoano hasta marzo de 2024. Misma fecha que Binter anuncia las conexiones con Las Palmas de Gran Canaria. En la medida en que avancen los meses, se irá conociendo si, como en estas últimas temporadas, las aerolíneas apuestan por renovar los vuelos a estos destinos.