- Fomentar la práctica deportiva entre los y las adolescentes. Ese es el objetivo del programa que desde el lunes y, durante un mes, permite probar la oferta del polideportivo Ibarra de Aretxabaleta al alumnado de cuarto curso de Educación Secundaria de Kurtzebarri eskola y Arizmendi ikastola. La iniciativa pretende "incidir en la importancia de adoptar un estilo de vida activo y saludable", explicó Maialen Alkorta, responsable del proyecto AtxabaltaMugi, donde se ha alumbrado este programa en el que toman parte 133 escolares de 16 años. Una franja de edad que, como recalcó Alkorta, no se ha elegido al azar, sino que "en ella se concentra el mayor número de jóvenes que abandonan el deporte".

A lo largo de cuatro semanas se darán cita en Ibarra, en las horas correspondientes a la asignatura de Educación Física, para conocer tres modalidades que se imparten en el polideportivo: gap, cycling y circuit training. Finalizada esta "unidad didáctica" se estudiará la posibilidad de incorporar una oferta de cursos adaptados a los horarios de estos adolescentes. Además, transcurridos tres meses se hará un seguimiento a los participantes para ver el nivel de penetración que ha tenido esta experiencia en sus hábitos deportivos.

AtxabaltaMugi inició su andadura en 2016 con el firme propósito de crear una sociedad más activa, poner freno al sedentarismo, aumentar la actividad física y promover hábitos saludables. Dirigido a todas las edades, cinco son los ámbitos en los que se trabaja bajo la coordinación de la cooperativa Athlon: el servicio de orientación deportiva; sesiones grupales de yoga y KOI (coordinación, equilibrio y fuerza); paseos saludables; talleres sobre alimentación, y el programa centrado en la adolescencia.

Según apuntó el técnico municipal de Deportes, Asier Mujika, en este tiempo el servicio de orientación deportiva, que opera de forma presencial los lunes y miércoles en Ibarra, ha concertado cerca de 1.200 citas. "El mayor número de usuarios y usuarias tiene más de 70 años. Le sigue el colectivo 56 a 65 años, y en tercer lugar, el de 46 y 55 años. Aunque han sido muchas menos, pero también se han atendido consultas y se ha hecho el correspondiente seguimiento a jóvenes de entre 16 y 35 años", precisó Mujika. El 73% de las usuarias son mujeres y el 27% restante, hombres.

En el balance que arroja AtxabaltaMugi en sus años de recorrido se puede destacar, asimismo, que el 50% de las personas que han recurrido al citado servicio de orientación "han pasado de ser no activas a ser activas".

Por otro lado, desde febrero está en macha un nuevo programa de abordaje de la capacidad funcional de las personas mayores, en el que hasta junio se trabajará con un grupo de diez atxabaltarras de más de 70 años. Este proyecto ha despertado el interés de Osakidetza, cuyos representantes se han desplazado recientemente hasta el polideportivo para conocer de primera mano los pormenores de la iniciativa. Entre el Servicio Vasco de Salud y AtxabaltaMugi se ha abierto una vía de colaboración "para ir todos de la mano".