La madera, el barro y el hierro cobran vida en la Oficina de Turismo de Oñati. Iñaki Jauregialtzo, Esteban Kerexeta, Angel Mari Milikua e Imanol Artola han transformado con sus manos estos materiales en arte. Los cuatro comparten su pasión por la escultura, que ahora ponen al alcance de todos en Ezustekoak, una exposición que invita al público a moverse entre la sorpresa y la interpretación que el visitante hace de las obras.

Fue en 2017 cuando Jauregialtzo, Kerexeta, Milikua y Artola se agruparon bajo el nombre artístico de Orbelaun, el caserío natal de Bitoriano Gandiaga en la localidad vizcaina de Mendata. No en vano, el particular universo creativo de estos cuatro escultores se topó hace ya tiempo en Arantzazu, un lugar que, como Gandiaga Topagunea, se ha convertido en su punto de unión. Tras exponer en Zegama y Donostia, el colectivo muestra ahora sus trabajos en Oñati, en un espacio, el de la Oficina de Turismo ubicada en San Juan kalea, que ha ido abriendo sus puertas a la cultura, la gastronomía y los creadores locales.

El cuarteto de artistas, todos ellos autodidactas, aceptó encantado la invitación que les lanzó el servicio municipal, porque, según destaca Jauregialtzo, es “una buena oportunidad para enseñar lo que hacemos a los oñatiarras y a los turistas”. “Nos hace ilusión exponer juntos en Oñati, en pleno centro y junto al antiguo molino San Miguel”, explican rodeados de los trabajos que dan contenido a la muestra que les gustaría aderezar con “algún acto cultural; trayendo a un músico o bertsolari para abordar la esencia sorpresiva y reflexiva de este proyecto”.

un paseo por la muestra Ezustekoak es el título de la exposición a la que dan cuerpo 45 piezas, además de una vitrina que exhibe miniaturas con distintos volúmenes y formas.

Alumbradas en su taller de Araia, Jauregialtzo ha seleccionado algunas de las obras que están incluidas en su original colección de cuadros en los que retrata, empleando para ellos azulejos como soporte, a conocidos oñatiarras, es el caso de Margarita Naparrena, junto con figuras de la historia y cultura vasca como Mikel Laboa, Xabier Lete, Ruper Ordorika, Txillardegi, José Miguel de Barandiaran, Iparragirre o Gabriel Aresti. También puede contemplarse un cuadro-friso que “simboliza los estados de ánimo por los que pasan los peregrinos que hacen el camino de Santiago”, detalla el escultor, que expone, asimismo, una serie dedicada a los músicos, entre ellos, txalapartaris, trompetistas, guitarristas y acordeonistas.

Esteban Kerexeta, por su parte, acerca hasta la Oficina de Turismo las piezas que son fruto de la etapa artística que atraviesa y que, tal y como precisa, le lleva a reflexionar y profundizar sobre el sufrimiento -la inmigración o las violaciones de derechos-, y la ausencia de diálogo, que representa por medio de cabezas y expresivos rostros. “Aunque la obra parece acabada por el autor, no está terminada hasta que el público la ve, la interpreta y opina acerca de ella”, recalca el escultor oñatiarra.

El tercero de estos artistas, Angel Mari Milikua, presenta desde una serie modelada con hayas viejas, a diversas perspectivas de la luna o su propia visión sobre Aitzulo. Y, por último, Imanol Artola, que cuenta con una muestra permanente en Zegama, recurre esta vez al hierro para darle una segunda vida en forma de arte.

La exposición podrá visitarse hasta el 15 de octubre, de 9.30 a 14.00 y de 15.30 a 19.00 horas.