Una caña, algo para picar y mucho teatro

Museum Cemento Rezola, la cafetería Botanika, Txirain Kultur Elkartea o el Club de Jubilados de Egia. Las artes escénicas no temen a ningún escenario; cualquier espacio donostiarra es un buen lugar para acercar el teatro y la música a la ciudadanía, tal y como demuestra cada año el Festival de Teatro de Bolsillo. La nueva edición del certamen, que comenzará mañana y durará hasta el próximo día 24, contará con estos lugares, entre otros, como improvisados espacios escénicos.

Durante las próximas semanas no será descabellado presentarse en un bar donostiarra, pedir una cerveza o una coca-cola y un jugoso pintxo de tortilla y disfrutar de una sesión gratuita de teatro; o acudir a una residencia o sociedad de la ciudad y encontrarse, sin quererlo, con artistas musicales que nunca antes se habían escuchado allí.

La 28ª edición del Festival de Teatro de Bolsillo propone desde mañana durante tres semanas de jueves a domingo un total de 35 representaciones de 17 compañías en escenarios poco habituales con el objetivo de acercar las artes escénicas al público que habitualmente no está acostumbrado a acudir al teatro.

De este modo, algunos establecimientos de la ciudad como el Scanner, en Gros; La Taberna, en Egia; Borroto Taberna, en Aiete; o Lau Taberna, en Amara, se convertirán, junto a otros espacios de la ciudad como Museum Cemento Rezola, Kontadores y el Club de Jubilados de Egia, en improvisados escenarios.

Esta iniciativa, organizada por Donostia Kultura a través del Área de Acción Cultural, apuesta cada año por obras de pequeño y mediano formato que encajan perfectamente con la cercanía de los espacios. Una oportunidad ideal para que los artistas experimenten nuevas propuestas e ideas narrativas, a la par que los ciudadanos conozcan proyectos que habitualmente quedan al margen de la programación cultural de la ciudad.

35 obras en 24 espacios En la edición de este año, el Festival de Teatro de Bolsillo programará 35 representaciones de 17 compañías diferentes -cuatro de ellas femeninas, cinco mixtas y ocho masculinas-.

Los espectáculos, que se repartirán en 25 espacios diferentes de la ciudad, serán igualitarios en cuanto al idioma -habrá 17 obras tanto en euskera como en castellano-. Además, cuatro de ellos serán estrenos: Ama-Alu-Lur (sorgin baten ametsak), Zurrunbiloan, Fabiolo Conecction y Sekretu polita.

El certamen arrancará mañana en tres espacios simultáneos. La cafetería Botanika acogerá la primera representación de Zurrunbiloan, a cargo de Txinparta Antzerki Taldea; el bar Scanner de Gros recibirá la obra Benditas + El elefante y la paloma, de la compañía El mono habitado; y la sala Doka contará con el monólogo Siendo Franco de Diego Peña.

El colofón al festival se celebrará el 24 de febrero con una gala de clausura en la sala Dabadaba en la que actuarán Tessa Andonegi y Ainhoa Aierbe con Mee Too; Javi Sancho y su Del deporte también se sale; Riki López con Me tengo contento; y la compañía Al Tran Tran con Con mallas y a lo loco.