Villabona - El puente de Legarreta, más conocido en Villabona como el puente de Sacem, será reformado por la Diputación Foral de Gipuzkoa. El objetivo de la actuación es ampliar la pasarela para garantizar la seguridad de los peatones, ya que es un paso muy transitado tanto por vehículos como por viandantes. Las obras comenzarán en febrero y estarán finalizadas en cuatro meses.

El Ayuntamiento de Amasa-Villabona llevaba mucho tiempo siendo consciente de la situación de este puente, que data de comienzos de la década de 1930 y permite que la carretera GI-4571 cruce sobre el río Oria. La empresa Sacem origina un gran número de desplazamientos de camiones, y, además, es un paso muy transitado por peatones, que deben compartir el tránsito con los vehículos. “Al poco tiempo de entrar en la Alcaldía y en una visita del Diputado General a Villabona, le hablé de la reforma que necesitaba este puente. Fue entonces cuando empezó una colaboración estrecha que ha dado sus frutos”, recordó ayer la alcaldesa, Maite Izagirre, acompañada por diputada de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide.

La representante foral reconoció que el proyecto no ha estado exento de dificultades, pero el objetivo fundamental ha sido segregar el tráfico de vehículos del de peatones, disponiendo para ello de una acera de dos metros de ancho para mejorar la seguridad. “La escasa anchura del puente hace que los vehículos tengan que cruzar el puente de manera alterna y los peatones viven situaciones diarias de riesgo”, explicó Oiarbide.

barandilla de separación La obra que va a acometer la Diputación consiste en adosar una estructura metálica de acero de 80 centímetros de ancho a ambos bordes del tablero, ampliando su anchura actual de 5,6 metros hasta alcanzar una anchura total de 7,2 metros. Esto permitirá disponer de una calzada de 3,5 metros de anchura para la circulación de vehículos y, además, de una acera para los peatones de dos metros de ancho, separada por una barandilla. Se mejorará la iluminación, que se colocará en la propia baranda con ocho puntos con luces led.

La alcaldesa de Villabona quiso expresa su satisfacción por el comienzo de la obra. “Hoy todos debemos sentirnos de enhorabuena porque en la primavera del próximo año, la nueva configuración del puente Legarreta será una realidad moderna y de calidad, que nos conecte en mejores condiciones con Zizurkil y Anoeta y que facilite el acceso a la zona industrial”, manifestó Maite Izagirre.

En opinión de Aintzane Oiarbide, además de garantizar la seguridad, “es necesario disponer de los recursos necesarios para impulsar nuestras empresas y acceder a ellas, por lo que somos conscientes de la importancia de mantener nuestras carreteras en buen estado”, subrayó la diputada de Infraestructuras Viarias.

El proyecto se encuentra actualmente en fase de adjudicación y, según las previsiones, las obras podrían comenzar en febrero. El plazo para la ejecución de los trabajos es de cuatro meses, y contará con un presupuesto de 501.000 euros.