Al ya exjugador de la Real Sociedad Carlos Martínez se le conoce como El expreso de Lodosa, debido a que nació en la localidad navarra. Pero el bravo futbolista ribero también es ya un poco guipuzcoano. No en vano, lleva muchos años viviendo en Donostia y se casó con una zumarragarra. Suelen visitar Zumarraga a menudo, donde tienen una vivienda, y es muy querido por los vecinos.

El primer contacto de Martínez con Zumarraga fue a través del fútbol. “Antes de conocer a Lydia, solo había venido a Zumarraga a jugar partidos contra el Urola. Creo que jugué en Zumarraga con todos los equipos, excepto con la Real B. Varios vecinos de Zumarraga me han comentado que se enfrentaron a mí”.

El pueblo lo conoció cuando comenzó su relación con la zumarragarra Lydia Irizar. Lo que más le llama la atención es lo pegado que está a Urretxu. “Es un pueblo peculiar, pues a Urretxu y Zumarraga les separa un río. Puedes poner un pie en Zumarraga y el otro en Urretxu”.

Le gusta el ambiente que hay en estos dos pueblos. “Hay un buen ambiente de poteo. Con la familia solemos potear debajo de casa y con la cuadrilla de Lydia, en la plaza y en Urretxu. Antes de que nacieran nuestras hijas íbamos mucho a Zumarraga. Aprovechábamos para tomar algo con los amigos y salir de noche. Ahora solemos ir a visitar a los abuelos. Si las niñas se quedan con los abuelos, aprovechamos para dar una vuelta con los amigos”.

Tal y como mandan los cánones, se casaron en el lugar elegido por la novia. Y siendo la novia de Zumarraga, solo podían casarse en un lugar: en la ermita de La Antigua. “Es el sitio que más me gusta de Zumarraga. Es un lugar espectacular”.

En La Antigua, precisamente, los zumarragarras celebran el día más grande del año: el día de Santa Isabel. El futbolista de Lodosa espera poder venir a Zumarraga el 2 de julio. “He estado varias veces y me parece un día muy bonito”.

Tiene relación, sobre todo, con la cuadrilla de su esposa. Pero también tiene amistad con los otros dos jugadores de Zumarraga que juegan en Primera División: Mikel Balenziaga y Dani García. Curiosamente, solo el navarro puede presumir de haber jugado en el primer equipo de la Real.

Musti Taldea También tiene amigos en la peña realista Musti Taldea. “Siempre me han tratado muy bien. Es gente encantadora. Cuando voy a Zumarraga, siempre me preguntan qué tal me va”.

Los de la peña Musti Taldea le tienen en gran aprecio. De hecho, le nombraron socio de honor por su relación con Urretxu y Zumarraga y el día de la boda les regalaron un cuadro con las imágenes de La Antigua y del palacio Ipeñarrieta. Aquel día, los socios de la peña acabaron de juerga con los novios y sus invitados. “Tuvimos una cena y a la noche nos juntamos con ellos. Txarly siempre ha sido muy atento con nosotros y cuando se lesionó le enviamos un mensaje de ánimo, que nos agradeció. Siempre nos ha parecido un gran jugador. Lástima que haya tenido mala suerte con las lesiones”, comenta Eva Mauleón.

Finalizada su etapa como realista, busca equipo. Quizá tenga que ir lejos a vivir, pero seguirá viniendo a Zumarraga. Y a Lodosa, por supuesto. Recomienda a los zumarragarras y urretxuarras visitar la localidad ribera. “Es más pequeña que Zumarraga, tiene unos 5.000 habitantes, pero en la plaza hay muy buen ambiente. Las piscinas están muy bien y las conservas no digamos. Son muchos los guipuzcoanos que veranean en aquella zona”.