donostia - La cárcel de Martutene podría desaparecer antes de que se construya la nueva prisión proyectada en Zubieta, lo que permitiría abordar la ejecución de la segunda fase prevista en el barrio de Txomin, que prevé añadir 350 viviendas a las cerca de 900 que están en ejecución. La opción de liberar los terrenos de Martutene fue expresada ayer en el Congreso de los Diputados por el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, que respondió a una pregunta formulada por el representante del PNV Mikel Legarda.

El diputado jeltzale recordó en su pregunta que Donostia tiene poco espacio para crecer y crear nuevas viviendas y manifestó que la cárcel de Martutene, con las obras del entorno, ha visto deteriorarse más su ya precaria situación. “El barrio ha sufrido una profunda transformación, se ha recrecido unos seis metros para evitar las inundaciones y la cárcel se ha quedado como una isla obsoleta y hundida”, recalcó Legarda, que aprovechó su pregunta para reclamar el ejercicio de las competencias penitenciarias en la CAV.

Legarda recalcó las “graves carencias estructurales y funcionales” de la prisión donostiarra, un centro que calificó de “obsoleto y saturado” y que puede acarrear, según destacó, “graves perjuicios” para sus internos y trabajadores.

Zoido calificó de “razonable y razonada” la reclamación del representante jeltzale y admitió que es el momento de abordar la cuestión, que colea desde el año 2005, para “poder despejar la situación”. El ministro del Interior añadió que es “imprescindible” liberar los terrenos de la actual prisión, una de las más antiguas y obsoletas que siguen en uso en el Estado español, así como de las más saturadas, y añadió que los reclusos no tienen por qué sufrir las consecuencias de estar ingresados en un centro anticuado. “A lo mejor es posible que, sin ser necesario que esté construida la prisión nueva, podamos liberar los terrenos y se cierre la prisión de Martutene”, declaró el responsable del Gobierno del PP.

“Expectativa positiva” Zoido manifestó también en su respuesta que el presidente de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios (SIEP), Miguel Contreras, tiene previsto reunirse próximamente con el alcalde de Donostia, Eneko Goia, para la estudiar la situación.

El regidor donostiarra, de viaje ayer en Barcelona, manifestó su satisfacción por el aparente avance del proyecto y expresó su “expectativa positiva” sobre las conversaciones previstas. Según su agenda, la reunión con el responsable del SIEP tendrá lugar el 10 de enero.

Por otra parte, el ministro del Interior recordó que ha salido recientemente a concurso los trabajos para crear un talud en Zubieta, previo a la construcción de la prisión proyectada en este punto. Si finalmente Interior acepta cerrar la cárcel de Martutene antes de la apertura de la de Zubieta, los reclusos tendrían que ser trasladados de modo provisional a otros centros penitenciarios cercanos.

Los primeros acuerdos entre el Ayuntamiento de Donostia y el Ministerio del Interior para el traslado de la cárcel datan de 2005, cuando la entonces directora de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, se comprometió con la ciudad a acelerar todo lo posible el traslado de la cárcel a Zubieta. Más tarde, en 2011, como recordó Zoido, se firmó un nuevo convenio que contemplaba las obligaciones por cada una de las partes para esta nueva cárcel, pero, según dijo, surgieron problemas “tanto en el terreno como dentro del mismo proyecto”. Las instalaciones de Zubieta, además, llegaron a licitarse en 2013, aunque la actuación fue suspendida para rehacer el proyecto.