donostia- Donostiako Piratak ven peligrar sus fiestas por la que definieron como “actitud negativa” del Gobierno Vasco al querer aplicar a las actividades que desarrollan en el puerto durante la Semana Grande una “tasa comercial” que, según señalaron, las harían inviables.
Los representantes de los Piratas afirmaron que continuarán trabajando en la consecución de un acuerdo sobre la base de que la labor que realizan es sin ánimo de lucro y con el único objetivo de hacer disfrutar a “miles de personas”.
“Este es un movimiento popular que se sustenta en el trabajo de muchas personas y que se enfrenta, cada año, a una pelea con la Administración”, añadieron los representantes de los Piratas, que lamentan que la postura oficial no sea la contraria, la de “ayudar” a que esta iniciativa festiva llegue a buen puerto.
Pero ante la Semana Grande de 2017 los Piratas se manifestaron “muy preocupados” por la falta de avances en las conversaciones que están llevando a cabo con el Gobierno Vasco, competente en la gestión de los puertos de Euskadi.
“No percibimos ninguna voluntad de acuerdo”, criticaron los Piratas, quienes subrayaron que su Semana Grande está “pendiente de un hilo”.
Según declararon, su intención siempre ha sido poder lograr un acuerdo con el Gobierno Vasco para volver a organizar un programa festivo “abierto a todos los ciudadanos”.
En los encuentros mantenidos hasta la fecha con los representantes del Gobierno de Gasteiz se les ha notificado que, al desarrollarse en el ámbito de La Flamenka una actividad de compraventa, en este caso la txozna, la tasa a aplicar debe de ser la que corresponde a una actividad comercial.
Pero los Piratas no lo entienden del mismo modo y abogan porque dicha tasa se aplique únicamente a la txozna y a las horas en las que esta se encuentre en funcionamiento, sin que afecte al resto de la zona ocupada - caso de los servicios- o a las horas en las que se están llevando a cabo otras actividades, como el montaje o desmontaje de los escenarios y otras estructuras.
flexibilidad “No lo vamos a negar, no nos parece bien, no estamos de acuerdo, y no creemos que un trabajo voluntario y sin ánimo de lucro, la organización de unas fiestas, se tenga calificar como actividad comercial”, añadieron lo portavoces de los Piratas. Pese a todo, insistieron, “seguimos teniendo una clara voluntad de llegar a acuerdos”, ya que lo único que reclaman es “flexibilidad” a la hora de aplicar las tasas.
“Tenemos el programa preparado, cientos de voluntarios dispuestos a trabajar y miles de personas esperando disfrutar con la Semana Grande Piratas”, añadieron los representantes de una iniciativa que echó a andar hace ya quince años y que tienen claro que no podría pervivir fuera del entorno en el que se ha llevado a cabo durante tres lustros.