Dos siglos de salvas de cañón en Irun
Palmera-Montero Gunea acoge, hasta el día 11, una exposición sobre la Real Orden del 28 de julio de 1817 que autorizó las salvas de cañón en Irun. Salvas que luego darían origen a la creación de la Batería de Artillería del Alarde de San Marcial.
La pólvora, su estruendo y el humo que se desata al detonarla, son parte ineludible de lo que es el Alarde en Irun, sea en forma de salvas de escopeta o de cañón.
Precisamente, el próximo 28 de julio se cumplirán 200 años desde que se promulgara la Real Orden de 1817, por la cual el rey Fernando VII concedió a la villa de Irun los títulos de muy benemérita y generosa, además de autorizar que se hicieran “salvas de cañón tanto el 31 de agosto, día de San Ramón, en el que se libró en 1813 la segunda batalla de San Marcial, así como cada 30 de junio, en recuerdo de la primera batalla de San Marcial, la del año 1522”.
Esa autorización fue el germen que con el tiempo llevó a la creación de la Batería de Artillería del Alarde. Precisamente, esta unidad y la Junta de Mandos del Alarde tradicional inauguraron anoche, en Palmera-Montero Gunea, una exposición que recuerda los dos siglos de aquel decreto real y repasa, al mismo tiempo, la historia de la propia Batería de Artillería.
abundante material Esta exposición “reúne abundante material que proviene de diversas fuentes, tanto coleccionistas particulares como instituciones o asociaciones, y ha supuesto un importante esfuerzo de coordinación”, señala Lula Retuerto, comisaria de la muestra y también cantinera de la Batería de Artillería en 1987.
Por un lado, “en una serie de paneles informativos con fotografías de distintas épocas, se cuenta la historia del disparo de salvas de cañon en Irun y la de Batería de Artillería, dividida en tres épocas: Sus inicios, el periodo entre 1919 y 1958, cuando las cantineras desfilaban sentadas sobre el armón del cañón y a partir de 1959, cuando las cantineras de Artillería empiezan a desfilar montando a caballo”, relata Retuerto.
En la muestra no faltan tampoco “documentos de época, relativos a la Real Orden de 1817 y a la instauración de la Medalla de San Marcial en 1814, justo después de que se librara en Irun, el 31 de agosto de 1813, una de las últimas batallas decisivas de la Guerra de la Independencia”, recordaba la comisaria de esta exposición, que podrá verse hasta el próximo día 11 de junio.
No faltan tampoco en la muestra “algunos trajes de época, cedidos por la asociación Urgull Histórico de Donostia, una colección de botones de trajes de artilleros del ejército, propiedad de Ramón Guirao, e incluso, algunas piezas como baquetas, mosquetes y hasta bolas de cañón originales de la batalla de San Marcial de 1813, cedidas por el Ministerio de Defensa”, detallaba, junto a Lula Retuerto, el capitán de la Batería de Artillería, Agustín Camarero.
Y por supuesto, uno de los elementos más vistosos de la exposición son tres cañones. “Se trata de dos cañones de avancarga, cedidos por los ayuntamientos de Lesaka e Irun (este, habitualmente ubicado en un lateral de la entrada a la casa consistorial) y de uno de los cañones con los que hoy desfila en el Alarde la Bateria de Artillería”.
colección de sellos La exposición ofrece también la posibilidad de ver un pequeño documental y una muestra de fotos de la Artillería realizadas por el estudio Lamia, además de una colección de sellos que para esta ocasión ha reunido la Sociedad Filatélica y Numismática del Bidasoa, que también ha colaborado en la organización de esta muestra.
“Se trata de sellos de distintas épocas con temática centrada en trajes militares”, y además, estos días, “se podrán comprar, al precio de tres y cinco euros, respectivamente, un sello y un sobre matasellado, especialmente diseñados con motivo de los 200 años de la Real Orden”, detalla Carlos Hernández, presidente de la Sociedad Filatélica y Numismática del Bidasoa.
Agustín Camarero, capitán de la Batería de Artillería, anima “a acercarse a ver esta exposición y conocer la historia” de esta unidad y de la Real Orden de 1817. La muestra, en la sala 5 de Palmera-Montero, puede verse de 18.00 a 21.00 horas de lunes a viernes, de 11.00 a 13.00 y de 18.00 a 21.00 horas los sábados y de 11.00 a 13.00 horas, los domingos.