La urretxuarra Mónica Leiva, en las elecciones de Moldavia
Ha hecho de observadora para la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa
urretxu - La catalana afincada en Urretxu Mónica Leiva ha estado en Moldavia, como observadora electoral. Leiva es periodista y durante varios años trabajó en Oriente Próximo. En Irán conoció a su marido, el zumarragarra Josu Iturbe, y desde hace varios años viven en Urretxu. Escribe para varios medios y forma parte de la lista de observadores electorales del ministerio de Asunto Exteriores español.
La de Moldavia ha sido su primera misión. “Fui con ilusión y curiosidad, pues es el país más desconocido de Europa. Conocemos todos los nombres de las capitales de Europa, excepto la de Moldavia: Chisinau”.
Leiva comenta que el país se enfrenta a grandes retos. “En 2014 hubo un desfalco del 15% del PIB del país. Hay una gran pobreza y el 30% de la población ha emigrado. Casi todos han venido a Europa Occidental”.
Esa emigración está provocando problemas. “La tierra está en manos de los mayores porque sus hijos se han ido del país y muchos terrenos no están pudiendo ser cultivados. Además, muchos niños están en manos de los abuelos y estos no tienen medios para llevarlos a la escuela. Hay muchos niños analfabetos”.
Por si todo eso fuera poco, el país sufre en primera persona las tensiones entre la Unión Europea y Rusia. “Es el primer país que queda fuera de la UE. Está entre Rumanía y Ucrania. Hay una gran tensión en la sociedad. Al ver que el intento de entrar en un sistema capitalista no les ha funcionado, cada vez hay más nostalgia de la Unión Soviética. Esa gran división se ha visto en las elecciones. El candidato pro ruso ha ganado por muy poco a la candidata pro europea”.
Además de los pro rusos y los pro UE, están los oligarcas. “Desde que Moldavia se independizó de la Unión Soviética, se han formado grupos oligárquicos que se han hecho con el control de la administración. Moldavia es un estado cautivo: está en manos de un oligarca que tiene a todos los políticos cerca y mueve los hilos. Los oligarcas se limitan a defender sus intereses, por lo que intentaban estar a bien con los dos candidatos, pero preferían que ganara el pro ruso porque lleva más tiempo dentro del sistema y tiene relación con la gente que maneja el poder económico y político. La candidata pro europea surgió de las protestas de 2015, por lo que era más imprevisible”.
Leiva añade que en las elecciones se garantizó la libertad del electorado, pero algunas candidaturas tuvieron dificultades para presentarse y la cobertura de los medios fue parcial. En el futuro, le gustaría tomar parte en más misiones de este tipo.