donostia - El Pleno de Donostia aprobó ayer por unanimidad encargar la defensa jurídica del reglamento de consultas aprobado, también por unanimidad, en abril, después de confirmarse el recurso presentado por el Estado en la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco. Hace meses que la Administración del Estado anunció su intención de impugnar la norma y, una vez interpuesto el recurso, el Consistorio se ha reafirmado en lo aprobado hace siete meses y defenderá su reglamento.

De momento, el Ayuntamiento ha remitido al juzgado el expediente recurrido y está por ver si dicta su suspensión cautelar antes de tomar una decisión definitiva o no. Mientras tanto, la normativa seguirá estando en vigor y cabe recordar que ya hay una propuesta presentada por la plataforma Donostia Antitaurina Orain para convocar una consulta sobre las corridas de toros en la ciudad. A no ser que se suspenda la norma o se anule, el Gobierno municipal se ha comprometido a tramitarla una vez que se presenten las 8.000 firmas que la deben solicitar según el reglamento.

carlos I Durante la sesión plenaria de ayer EH Bildu planteó también que se utilice ese reglamento de consultas que sigue en vigor para replantear el proceso abierto en Amara Berri con respecto al futuro del subterráneo de Carlos I. El Gobierno municipal ha enviado 15.000 cartas a vecinos de la zona, a modo de sondeo, para pedirles que decidan si prefieren sepultar el pasadizo o convertirlo en un aparcamiento de bicis. Sin embargo, los tres grupos de la oposición criticaron que ese sondeo se ha organizado de forma “improvisada” y sin unos criterios claros con el fin de aclarar, según la oposición, el desacuerdo interno del Gobierno municipal, después de que el socialista Ernesto Gasco anunciara que se sepultaría y la jeltzale Pilar Arana anunciara que presentarían un proyecto más concreto para el aparcamiento de bicis.

También criticaron las formas en las que se ha planteado el sondeo. “Hay vecinos que han recibido cuatro cartas en su buzón. ¿Pueden votar cuatro veces?”, preguntó el edil de Irabazi Loïc Alejandro. También el popular Txema Murguiondo afirmó que una consulta “debe someterse a unas reglas de juego” y el edil de EH Bildu Axier Jaka censuró que no es un sistema “muy fiable” y se ofreció colaborar con ellos si quieren un proceso de participación real a través del reglamento de consultas.

El Gobierno municipal rechazó las acusaciones. Arana dijo que no hay desacuerdo en el Gobierno, “sino un acuerdo en consultar a los ciudadanos” y Gasco añadió que el sondeo “no será decisorio, sino un elemento más” a la hora de definir el futuro de este punto. “Que a EH Bildu no le gusten los sondeos es el colmo”, afirmó Gasco, que añadió que la empresa encargada de organizarlo ha sido la misma que organizó el referéndum de Igeldo. Subiendo algo el tono acusó a Jaka, a quien irónicamente llamó “rey de la participación ciudadana”, de no haberse reunido con los vecinos de Amara antes de apostar por el aparcamiento de bicis. “Ha mentido a conciencia, sabe que sí nos reunimos con los vecinos de Amara”, le respondió Jaka.

tono más duro El tono de los concejales también se agrió en el debate de otra serie de cuestiones. A la hora de presentar una moción sobre la Lomce, la edil de EH Bildu Naiara Sampedro criticó que la concejala de Cultura, Miren Azkarate, no estuviera presente en la sesión. “No entiendo qué puede haber más importante que un pleno municipal para no estar aquí”, apuntó Sampedro. El alcalde, Eneko Goia, se molestó y respondió que él había autorizado a Azkarate a permanecer en Madrid negociando un patrocinio para el 2016 y que cada grupo decide quién interviene. “Siento no ser Miren Azkarate, pero es lo que hay, aunque ya sé que no soy muy bienvenida en EH Bildu”, apuntó la concejala jeltzale Aitziber San Román al intervenir para responder a Sampedro. También criticó la actitud de la “izquierda abertzale” y la portavoz Amaia Almirall reclamó al alcalde que se respete que el grupo presente en el Pleno es EH Bildu. “La educación debe servir para trabajar juntos, no para dar patadas como hace San Román”, contestó Sampedro.

Otro rifirrafe surgió entre el edil de EH Bildu, Ricardo Burutaran, y el alcalde. Burutaran censuró que el PP acusara o insinuara que la legislatura anterior se cedieron locales sin atender a la norma y Goia le cortó para pedirle que se ciñera a la cuestión a debate. Burutaran le reprochó que no cortara antes a otros representantes y le pidió “más ecuanimidad al dirigir el Pleno”.