Donostia - Las oficinas de la funeraria Memora, que ofrece el servicio que prestaba Polloe hasta su privatización hace cinco años, volverán a manos del Ayuntamiento a finales de 2016. La junta de gobierno de Donostia aprobó ayer enviar una comunicación a la empresa de servicios funerarios para recordarle que, una vez terminado el contrato de arrendamiento, el Consistorio no renovará el contrato de alquiler ya que tiene previsto utilizar el local para ofrecer servicios públicos.

Las oficinas que utiliza la funeraria se encuentran en el número 14 del paseo de Duque de Mandas. El local tiene una planta baja, con 362 metros cuadrados, otra en el sótano con 61, y seis plazas de garaje.

La empresa Mémora ganó en 2010 el concurso convocado por el Ayuntamiento para la gestión de servicios funerarios. La institución local se vio obligada a convocar la licitación por una sentencia judicial que señalaba que el Consistorio solo podía ocuparse del cementerio y del crematorio, pero no de los demás servicios funerarios, liberalizados por ley.

Desde entonces, la funeraria, que sigue conociéndose también como Polloe, gestiona el tanatorio, el transporte de cadáveres y el embalsamamiento en Donostia. Mémora abonó 1,4 millones de euros al Ayuntamiento por hacerse con la gestión de los servicios mortuorios.

Hasta su aterrizaje en Donostia, esta sociedad tenía una gran implantación en el Estado español, pero no en Euskadi, territorio al que pretendía extenderse desde su asentamiento en la capital guipuzcoana.

Aunque otras empresas ofrecieron mejores precios en el concurso, las propuesta técnica influyó para que el tribunal se inclinase por esta firma, muy presente en Catalunya, Levante, Guadalajara, Aragón y León, entre otros puntos. - C.A.