"Los jubilados de Errenteria vivieron una época de mucho movimiento sindical y están acostumbrados a reivindicar"

ERRENTERIA - ¿Por qué decidieron crear la asociación de jubilados y pensionistas Duintasuna?

-Ante el panorama que se veía con la crisis, enseguida nos percatamos de que iba a repercutir en los sectores más desfavorecidos, en los pensionistas y jubilados sobre todo. Por eso decidimos montar la asociación a nivel territorial, con el fin de dar respuestas a los problemas que nos afectan no solo en una zona, sino en toda Gipuzkoa.

¿En qué se diferencia Duintasuna del resto de asociaciones?

-Hemos empezado a trabajar con el asunto de las pensiones (cuya actualización no va a ir ligada necesariamente al IPC) y con el copago o repago de los medicamentos. A partir de ahora también vamos a estudiar el tema de la dependencia, que es un asunto muy importante, porque se está dejando sin cobertura a un sector muy desfavorecido. Se está recortando muchísimo dinero y hay que vigilar los ratios de las residencias de ancianos y de los centros de día.

A pesar de trabajar a nivel de Gipuzkoa, hacen actividades específicas en Oarsoaldea.

-Sí. En Errenteria hemos empezado con un ciclo de charlas. Los jubilados y los pensionistas están cada vez más interesados en estos temas porque les afectan directamente, por eso pensamos en llevar a cabo charlas sobre las pensiones y el copago en los barrios de Errenteria. Para llegar a los barrios nos hemos puesto en contacto con las asociaciones de vecinos. Ya hemos hecho dos charlas. La primera de ellas en Iztieta, en la sociedad Batasuna, donde el cura de la parroquia nos ayudó a organizar un pintxo-pote. Acudieron unas cien personas. Posteriormente fuimos a Galtzaraborda donde hablamos con la parroquia, el hogar del jubilado y la asociación de vecinos y, conjuntamente con ellos, organizamos otra charla en la que nos juntamos alrededor de 70 personas. La siguiente va a ser en Beraun. Nuestra idea es acudir a todos los barrios y al resto de Oarsoaldea.

También suelen celebrar concentraciones en Errenteria en las que cuentan con el apoyo de una veintena de asociaciones de Oarsoaldea e incluso de Bidasoa.

-Nos reunimos todos los primeros lunes de mes en la plaza del ayuntamiento a las 11.00 horas. Llevamos dos pancartas en las que salen todos los colectivos que nos reunimos. Luego solemos hacer un recorrido. Nos paramos frente al ambulatorio y gritamos "No al copago" y una vez fuimos a la oficina de Kutxabank para entregarle al director una carta sobre la problemática de los desahucios, porque hay muchos jubilados que están en peligro de perder sus viviendas y a otros se la han quitado por avalar a sus hijos. Nosotros no estamos de acuerdo en que se privatice la caja de ahorros de Gipuzkoa. Llevamos ya un año concentrándonos. No sabemos hasta cuándo vamos a estar así, pero la gente dice que tenemos que seguir concentrándonos.

¿Se llevan a cabo este tipo de concentraciones en otros municipios de Gipuzkoa?

-Como Duintasuna estamos haciendo concentraciones en Donostia, también los primeros lunes de mes, y en Andoain, los martes. Estamos intentando movilizar los pueblos, pero cuesta mucho porque en algunos sitios los hogares de jubilados son muy reacios a meterse en este tipo de reivindicaciones. No hay suficiente conciencia.

¿Y por qué Errenteria es el contrapunto de esas localidades?

-Porque a la generación que está ahora en los hogares de jubilados de Errenteria le tocó vivir una época en la que hubo mucho movimiento sindical con toda la industria que había aquí y tienen una experiencia en este tipo de reivindicaciones. Han estado toda la vida trabajando para poder vivir bien cuando se jubilaran y ahora ven que todo eso por lo que lucharon se lo están quitando.