ezkio-itsaso. La localidad más afectada la obra del Tren de Alta Velocidad (TAV) es Ezkio-Itsaso. La línea atravesará todo el municipio, en el que además se construirá una estación. Los vecinos llevan ya muchos meses soportando las obras y han dicho "basta". El jueves, la corporación compareció en rueda de prensa para solicitar a Gobierno Vasco y Diputación Foral de Gipuzkoa que tomen medidas. Piden que los camiones salgan limpios de las obras, se mantengan limpias las carreteras y se reparen los desperfectos causados.

El encargado de leer el texto fue el alcalde, Garikoitz Aiesta. Lo hizo con semblante serio y tono vehemente. Recordó que Ezkio-Itsaso es "sin ninguna duda" la localidad más afectada por la Y vasca. "Esta infraestructura atraviesa nuestro pueblo de lado a lado y se están construyendo túneles, puentes, una estación con plataforma y un puesto de adelantamiento y estacionamiento de trenes".

Añadió que, "por si todo esto fuera poco", la tierra que se excava en otros tramos del TAV se deposita en un vertedero de Ezkio-Itsaso. "Está cerca del barrio más poblado del pueblo, Santa Lutzi, y son cientos los camiones que pasan a diario por este barrio".

Recordó que Ezkio-Itsaso ha hecho en los últimos años "un gran esfuerzo" en pos del desarrollo y la obra está dando al traste con él. "El nuestro es un pueblo pequeño y humilde. Tras la construcción de la autovía Beasain-Durango, se han edificado viviendas junto a la carretera vieja. Así, se ha dado a los jóvenes la oportunidad de vivir en el propio pueblo. Las cosas iban bastante bien, hasta que comenzaron las obras de esta infraestructura gigante".

Hizo público que por culpa del "terrible" tráfico de camiones y porque este tipo de obras "se hacen como se hacen", en todos los barrios de Ezkio-Itsaso existe "una gran inquietud". No en vano, los propios edificios se están viendo afectados. "Cuando no es el polvo, es el barro. Nuestros prados y nuestras casas cada vez están peor. Después de invertir tanto esfuerzo y dinero, esto es un sinvivir, los vecinos se encuentran en una situación insoportable, viendo que las obras afectan cada vez más a sus propiedades y sus vidas".

solo palabras bonitas Llegados a este punto, denunció la falta de apoyo de las instituciones. "El Ayuntamiento está tratando de proteger a los vecinos. Para ello, estamos buscando la implicación de todas las instituciones. Nos reunimos a menudo con Eusko Trenbide Sarea (ETS), entidad pública dependiente del Gobierno Vasco. Intercambiamos información y tenemos firmados convenios. El trabajo es positivo, pero muchas veces solo recibimos palabras bonitas".

Tampoco olvidó a la Diputación Foral. "Dice que hay que proteger a los pueblos pequeños y gobernar para los ciudadanos. Bonitas palabras, con las que estamos de acuerdo. Pero, una vez más, todo queda en palabras".

La corporación recuerda que la Diputación es la encargada del mantenimiento de la red viaria y que la obra del TAV está afectando a las cuatro carreteras del municipio: la que va de Salbatore a Azpeitia, la que lleva a Itsaso, la antigua Beasain-Durango y la que lleva a Ezkio. "¡Cuatro de cuatro! ¡Menuda marca! Todas las carreteras pertenecen a la Diputación y en ellas se están concentrando barro y porquería. Las tuberías están a rebosar y las cunetas destrozadas. Los conductores en dificultades, pozos por todas las esquinas, el Ayuntamiento quejándose... ¡Y aquí no pasa nada!".

Denuncian que la obra no se para y ni siquiera se toman unas mínimas medidas correctoras. "Se trata de una obra de interés general y no se aplican expedientes sancionadores que sirvan como ejemplo. ¡Ay, si a alguno de nuestros pobres vecinos se le ocurre ensuciar un poco la carretera con su tractor!".

En vista de esta situación, han decidido hacer públicas sus demandas. Piden a Eusko Trenbide Sarea y la Diputación Foral que se preocupen de mantener limpio el pueblo y se hagan cargo de los desperfectos causados por la obra. "Las carreteras deben mantenerse libres de polvo y de barro y no como hasta ahora, que llevan la porquería de un lado a otro con la ayuda de barredoras y cisternas. Además, los camiones deben salir limpios de la obra y no utilizar las carreteras para limpiarse".

En cuanto a los daños que la obra ha causado hasta ahora, exigen que las instituciones o los contratistas se hagan cargo de ellos mediante convenio. "ETS cuenta con información actualizada. Estamos hablando de limpieza de tuberías, aceras y urbanizaciones y limpieza y pintado de edificios". Para concluir, dejaron claro que solo están pidiendo que Ezkio-Itsaso vuelva a ser un lugar "habitable".