Lazkao. La ikastola San Benito de Lazkao cumple este año su primer medio siglo de vida y, para celebrarlo, la comunidad educativa ha organizado un completo programa de actos. Para empezar, este domingo tendrá lugar una salida montañera. La fiesta de aniversario se celebrará los días 25 y 26 de mayo y para el 1 de junio están organizando un rally. Además, se abrirá una exposición de fotografías, se publicarán un libro y un DVD sobre la historia del colegio y se han sacado a la venta camisetas con el nuevo logo del centro.

La ocasión es merecedora de semejante despliegue de medios, pues la ikastola San Benito fue una de las pioneras. Comenzó su andadura en 1963, gracias al empeño de Jaxinto Setien y Aitor Murumendiaraz. Estos dos hombres consiguieron implicar a padres, profesores y colaboradores. La ikastola echó a andar con quince alumnos y dos profesoras: Marisabel Aldasoro y Mari Karmen Eizagirre. Por aquel entonces el colegio se llamaba San Miguel y tenía sus locales en la casa Bordatxuri. San Benito enseguida necesitó más espacio y los frailes, las monjas y varios vecinos prestaron sus locales.

Conseguir profesores tampoco era fácil, pues había pocos titulados vascoparlantes y la metodología de enseñanza que se implantó en la ikastola era novedosa. Para hacer frente a estos problemas, se organizaban cursos para los profesores. La situación política no ayudaba, pero los lazkaotarras hicieron frente a todos los contratiempos a base de trabajo y coraje.

Durante estos 50 años se han superado varios hitos: en 1970 se legalizó la ikastola gracias al apoyo de los benedictinos y la escuela pasó a llamarse San Benito, en 1983 surgió la asociación cultural San Benito, en 1984 se construyó el actual edificio, en 1986 se comenzó a impartir Bachillerato, en 1990 se acogió a alumnos de otros pueblos, en 1992 se abrió el comedor y en 1994 se ofreció servicio de transporte a toda la comarca. 2003 y 2004 fueron dos años especialmente fructíferos: la ikastola organizó la fiesta Kilometroak 2003, se logró la Q de Plata, se convirtió en cooperativa y se amplió el edificio San Prudencio. En 2005 terminaron los trabajos de reforma en la parte del edificio correspondiente a la Educación Primaria y en 2006 se amplió y acondicionó el edificio Mikelar.

Lazkao es la tercera localidad más poblada de Goierri, pero su ikastola es la más antigua y la que cuenta con más alumnos. Durante estos 50 años miles de goierritarras han pasado por las aulas de San Benito. Algunos de aquellos niños dieron después mucho de qué hablar. Por ejemplo, el futbolista lazkaotarra Josu Sarriegi. Tras una fructífera carrera en el Alavés, el Athletic de Bilbao y el Panathinaikos de Atenas, al finalizar la pasada temporada colgó las botas y volvió a Lazkao. Todos los días va a la ikastola San Benito, pues su hijo de tres años está escolarizado en este centro. Su hija tiene un año y cuando llegue el momento irá a la ikastola de Lazkao, por supuesto.

Sarriegi guarda gratos recuerdos de su etapa como alumno de la ikastola. "Para mí San Benito siempre será muy especial. Es en esta escuela donde estudié hasta COU. Casi todos los recuerdos de aquellos años están unidos a la ikastola".

Cuando se le pregunta qué tipo de alumno era, dice que no era de los peores. "Los había peores. También mejores. No suspendía muchas asignaturas. Me gustaban las de ciencias. Se me daban mucho mejor que las de letras. Lengua, Literatura e Historia se me daban muy mal", reconoce.

No ha olvidado a sus profesores. "Me acuerdo de muchos de ellos: Armando, Mari Carmen, Ane, Maite... Muchos de ellos siguen en San Benito y dentro de unos años darán clase a mis hijos".

Cuando le llegó la hora de escolarizar a su hijo no tuvo ninguna duda. "Tener una escuela así en el propio pueblo es un lujo: sé que le ofrecerán una buena educación, sin necesidad de salir del pueblo. En San Benito están haciendo un gran trabajo".

los primeros alumnos Otro lazkaotarra ilustre que estudió en la ikastola San Benito es el músico Kaki Arkarazo. Tocó en los grupos M-ak, Kortatu y Negu Gorriak (entre otros) y en la actualidad trabaja como productor en su propio estudio: Garate de Andoain.

Cree que entró en la ikastola en el segundo año de esta. Recuerda, sobre todo, que los cambios de local eran continuos. "De Bordatxuri fuimos a la lechería. En las clases apenas había mobiliario. Solíamos estar en el suelo formando letras con palillos. En la época en la que estuvimos en los locales de la parroquia hubo altercados y la Guardia Civil nos echó de la escuela".

Años después San Benito pudo construir por fin su propio edificio y Arkarazo colaboró en los trabajos. "Para entonces yo estudiaba en el liceo Alkartasuna de Beasain. Mi padre era carpintero y yo ayudé en las labores de carpintería".

Tras finalizar el Bachillerato, fue a Deusto a estudiar Sociología. Esta carrera le decepcionó y dejó los estudios. Reside en Usurbil y visita Lazkao muy de vez en cuando, pero sigue recordando con cariño los años pasados en la ikastola. "Tengo unos recuerdos muy gratos. Las primeras ikastolas tuvieron que hacer frente a muchas dificultades. Eso exigía mucho a alumnos y profesores y creo que nos ha beneficiado".