eL Gobierno municipal de Bildu logrará este año sacar sus presupuestos adelante, por lo que no se verá obligado a trabajar con las cuentas prorrogadas del ejercicio anterior, como sucedió en 2012. La renuncia de socialistas y nacionalistas a presentar una enmienda a la totalidad deja vía libre a Bildu para aprobar las cuentas previstas para 2013. Solo el PP podría defender una objeción total al borrador económico, aunque incluso en ese caso no parece probable que los otros dos partidos de la oposición la apoyasen. De hecho, tanto el PSE como el PNV se han mostrado últimamente a favor de que las instituciones, y más en concreto el Consistorio donostiarra, dispongan de un presupuesto en toda regla.
Eso sí, las cuentas de Bildu podrán variar respecto a lo previsto, ya que las tres formaciones opositoras podrán aprobar enmiendas que deben incluirse en el documento final.
Ayer, el portavoz socialista, Ernesto Gasco -que pactó con Bildu subir en cuatro millones el techo de gasto para este año lo que permite un presupuesto de 337 millones- reiteró que "no es momento de prórrogas presupuestarias porque lo que Bildu ha conseguido en 18 meses es que la ciudad esté parada". Asimismo, anunció que defenderá enmiendas, algunas sin contenido económico, para evitar que la ciudad pierda actividad.
Por su parte, el portavoz del PNV, Eneko Goia, también descartó una enmienda a la totalidad, en sintonía con lo anunciado por su formación. "En el actual contexto vamos a hacer un ejercicio de responsabilidad y no vamos a propiciar que Donostia carezca de presupuesto", declaró. También anunció que su grupo presentará enmiendas, que actuarán como medidas correctoras sobre el documento que, según recalcó, no ha sido negociado con Bildu "aunque ha habido reuniones".
Por otra parte, el Ejecutivo mostró ayer su satisfacción porque el Ayuntamiento deberá devolver este año 3,6 millones de euros al Fondo Foral de Financiación Municipal, 1,91 millones menos de lo previsto hasta el momento.
El delegado de Hacienda, Jabi Vitoria, señaló que la menor devolución es un dato "positivo", porque aportará algo más de fondos al presupuesto. No obstante, recordó que Donostia tiene un riesgo adicional de pagar hasta 3,3 millones "como consecuencia de las discrepancias entre la Comunicad Autónoma del País Vasco y el Estado en el cálculo del cupo".